Albert Rivera

Ciudadanos da 48 horas al PP para firmar el acuerdo

Girauta advierte al PP: «O acepta la mayor parte de reformas institucionales o no estamos en el “sí”». Maillo dice que «aún hay tiempo» y confía en el acuerdo por encima de los «altibajos» de la negociación

Los integrantes del equipo negociador de Ciudadanos Melisa Rodríguez, Juan Carlos Girauta (i-d, primer plano), Luis Garicano, Toni Roldán (i-d, centro), Miguel Gutiérrez y José Manuel Villegas (i-d, fondo), a su llegada esta mañana al Congreso
Los integrantes del equipo negociador de Ciudadanos Melisa Rodríguez, Juan Carlos Girauta (i-d, primer plano), Luis Garicano, Toni Roldán (i-d, centro), Miguel Gutiérrez y José Manuel Villegas (i-d, fondo), a su llegada esta mañana al Congresolarazon

►Los populares creen que podrán llegar a un acuerdo pese a las exigencias de Rivera ►Los negociadores seguirán reunidos para intentar firmar el sábado

El PPoptó ayer por mantener el empuje de la negociación conCiudadanos (C’s) y resaltar los puntos de acuerdo con ellos en economía, política social, modelo de Estado, e incluso corrupción, en vez de incidir en los elementos que siguen separándoles, y donde sí colocó el foco la otra parte en su estrategia de escenificación. Un tira y afloja que quedó coronado con el ultimátum público de 48 horas que dejó por la tarde, en un receso de la negociación, la formación naranja para que los de Mariano Rajoy cedan a algunas de sus exigencias en materia de reforma institucional o para cuantificar la inversión social. Ciudadanos representó que sigue tensando la cuerda, instando a cerrar un acuerdo como muy tarde este sábado, el mismo plazo que manejan en la dirección popular. Estos últimos, y pese al ruido de tensión que alimentan desde Ciudadanos, siguen confiando en que haya un acuerdo y que pueda ser firmado este fin de semana por los máximos dirigentes de los dos partidos.

El portavoz de Ciudadanos, Juan Carlos Girauta salía de la mesa negociadora con el mismo tono de «preocupación» que empleó el miércoles y lanzó dos mensajes de advertencia para el PP. «O aceptan la mayor parte de reformas institucionales o no estamos en el sí», y la otra, fijó un ultimátum: «Ojalá existiera voluntad. Nos damos a nosotros mismos y a la negociación 48 horas». Con ello empleó una de las técnicas de una estrategia de negociación: la de la retirada aparente, que se trata de hacer ver que se levantan de la mesa, pero no lo hacen, y la otra, la del ultimátum para presionar a la parte contraria de la negociación. Con ello, la formación naranja quiere hacerse valer, pensando ya en el día después del 2 de septiembre tras haber dado un «sí» a Mariano Rajoy. Quieren compromisos para que luego nadie pueda decirles que se han «vendido».

Girauta reconoció que había «avances concretos» sobre materias que son objeto de negociación y que se tenía que seguir «transaccionando», pero los avances no van en la dirección de los dos puntos con los que Ciudadanos ahora mismo presiona. Insistió en que se siguen sin cuantificar las cinco medidas sociales que propusieron ni tampoco hay consenso en las reformas institucionales. «No sabemos cuánto cuestan las medidas sociales, siguen sin estar cuantificadas». Convencido de la «buena fe de todo el mundo» dijo que «el tiempo se acaba y también nos pasan las horas del reloj y las expectativas de la sociedad española pueden verse falseadas», dijo. Además aseguró que en la formación naranja «deseamos poder darle el sí a la investidura del señor Rajoy, queremos hacerlo, por favor dennos motivos para hacerlo», dijo Girauta. Volvió a pedir «por favor» al PP que cuantifique las medidas y acepte también «por lo menos una buena parte» de las reformas institucionales que reclama Ciudadanos. Y, aunque aseguró que en su partido son conscientes de las dificultades presupuestarias y de la «escasez de recursos», advirtió de que ésta es una cuestión de «prioridades» y pidió al PP que «pinche la burbuja política» y el «pesebre», en alusión a las diputaciones y al senado.

Con un discurso muy diferente compareció el vicesecretario de organización del PP ante los medios y subrayó que se había «avanzado mucho» y recordó que lo que se está negociando «no es un acuerdo de gobierno sino de investidura» y que la disponibilidad de los populares «sigue siendo la misma». Tras el ultimátum de 48 horas impuesto por el portavoz de Ciudadanos, Maillo indicó que «aquí no ha acabado nada», y aseguró que la formación naranja no había puesto ese plazo al que aludía Girauta encima de la mesa de negociación. «No tiene por qué ser 48 horas sino que puede ser esta misma noche, o en 24 horas. Nuestra propuesta es que no hay límite y no aceptamos plazos», destacó Maillo.

Mientras «algunos hablan de los desacuerdos», el vicesecretario de organización del PP resaltó que han logrado avanzar en un total de 100 medidas, cuatro se han quedado para el final para seguir negociándolas ya que fueron algunas en las que encontraron los principales escollos como eran el contrato único, las cuotas para autónomos o la lucha contra el fraude. También expresó el avance que a su juicio se ha producido en materia de regeneración democrática y, especialmente, sobre el pacto de Estado contra la corrupción que PP y C’s quieren que suscriban los demás partidos.

En cuanto a la cuantificación de las medidas sociales, Maillo dijo que «hay que pensar primero en llegar a acuerdos en los contenidos» y pidió al portavoz de Ciudadanos «un poco de paciencia» porque, «las cifras siempre vienen al final». Destacó que tanto PP como la formación que lidera Albert Rivera están comprometidos con mantener «nuestros compromisos de estabilidad presupuestaria» con la Unión Europea.

Aunque entiende que C’s sólo quiera un acuerdo global consideró «bueno poner sobre la mesa» los acuerdos parciales ya logrados. Consideró como lógicos estos «altibajos», que se producen en cualquier tipo de negociación, además de subrayar que no es posible llegar a un acuerdo «de un día para otro» recordando que PSOE y C’s para su pacto de investidura invirtieron casi dos semanas.

Al cierre de esta edicición la reunión continuaba y al margen de la hora de finalización mañaña se reanuda a las 11:00 en el Congreso de los Diputados.

Los puntos del desencuentro

- Inversión social: C’s pide la cuantificación de sus cinco medidas sociales. Éste es uno de los puntos que para ellos supone un «freno». El PP aún no ha dado cifras del coste porque insiste que primero «hay que pensar en contenidos». También recuerda que eso forma parte del presupuesto y que C’s se comprometió con cumplir los objetivos de déficit.

- Primarias: C’s apuesta por imponer que el PP lleve a cabo un sistema de primarias a nivel interno y el PP reivindica su derecho a decidir como partido y propone como alternativa promover reformas en la Ley de Partidos.

- Senado:C’s apuesta por reformar la Cámara Alta y el PP apuesta por convertirlo en una cámara de representación territorial.

- Diputaciones: C’s pide que se eliminen y PP considera que prestan un servicio a la España rural importantísimo.

- Despolitización de la justicia: En este punto tampoco han encontrado por ahora consenso.

- Contrato único:C’s prometió en su programa el contrato único con indemnización creciente según la antigüedad del trabajador y PP cree que debe haber más de una modalidad de contrato.

- Cuota para autónomos:C’s quiere que sean progresivas según los ingresos y el PP cree que puede prestarse al fraude y suponer un elevado coste en términos de recaudación. Aunque se ha ofrecido a estudiarlo.