Comunidad de Madrid

Ciudadanos ganaría en la Comunidad de Madrid y podría gobernar con PP o PSOE

El partido de Albert Rivera se convierte en la primera fuerza en la Comunidad de Madrid, con dos escaños de ventaja sobre los populares. La formación naranja sumaría la mayoría absoluta tanto con el PP como con el PSOE.

Ciudadanos ganaría en la Comunidad de Madrid y podría gobernar con PP o PSOE
Ciudadanos ganaría en la Comunidad de Madrid y podría gobernar con PP o PSOElarazon

El partido de Albert Rivera se convierte en la primera fuerza en la Comunidad de Madrid, con dos escaños de ventaja sobre los populares. La formación naranja sumaría la mayoría absoluta tanto con el PP como con el PSOE.

Ciudadanos ganaría hoy las elecciones autonómicas en Madrid, multiplicaría por dos su resultado de 2015 y tendría incluso la opción de elegir entre el PP y el PSOE como socio de gobierno. Son las tres principales conclusiones de la encuesta realizada por NC Report para LA RAZÓN. El sondeo certifica el fuerte impacto electoral del terremoto político que sacude Madrid desde el estallido del «caso máster» y que culminó hace siete días con la dimisión de Cristina Cifuentes tras la publicación de un vídeo de 2011 que muestra a la ex presidenta sustrayendo dos cremas de un supermercado. La encuesta de Nc fue realizada la semana pasada –entre el 23 y el 28 de abril–, coincidiendo precisamente con su renuncia.

En este escenario, el partido de Albert Rivera pasaría a ser la opción favorita entre los madrileños con 782.000 votos, más del doble de los que cosechó en los últimos comicios autonómicos. Con 38 diputados –obtuvo 17 en 2015– sería la primera fuerza en la Asamblea de Vallecas, además de la única que gana apoyos respecto a lo que sucedió hace cuatro años. El retroceso más fuerte lo experimenta el Partido Popular: caería hasta los 735.000 votos, después de que en 2015 la lista encabezada por Cifuentes superase la barrera del millón de sufragios. La bancada popular se vería reducida hasta los 36 diputados, dos menos de los que tiene Ciudadanos y 12 por debajo de su representación actual.

El fuerte desgaste del PP, sin embargo, no supone una mejora en la perspectiva del PSOE y de Podemos ante la próxima cita con las urnas. Ambos partidos caen. Ni siquiera el debate generado en torno a la moción de censura presentada por Ángel Gabilondo para desalojar a Cifuentes de la Puerta del Sol ha servido para mejorar su perfil de presidenciable a ojos de los madrileños. Los socialistas se dejarían 165.385 votos y seis escaños: desde los 37 obtenidos en 2015 hasta los 31 que obtendría de celebrarse ahora los comicios.

Por su parte, el partido que lidera Pablo Iglesias, inmerso en este momento en el proceso de primarias que auparán a Íñigo Errejón como candidato, tampoco saca partido de la crisis abierta en el Ejecutivo autonómico. La formación morada pasaría a ser la cuarta fuerza de la Asamblea con casi 100.000 votos menos que en 2015: retrocedería desde los 27 hasta los 24 diputados.

Este baile de escaños haría saltar por los aires el actual equilibrio de fuerzas en el Parlamento regional. Las elecciones de 2015 partieron en dos mitades casi simétricas la asamblea: PP y Ciudadanos sumaron entonces 65 asientos –que es exactamente la cifra que marca la mayoría absoluta–, mientras que PSOE y Podemos lograron 64. Ahora, con los datos de la encuesta, todas las opciones de formar gobierno pasan ineludiblemente por Ciudadanos. Con las tres primeras fuerzas –Cs, PP y PSOE– separadas por apenas 6 escaños, Podemos perdería cualquier capacidad de decisión. En cambio, Ignacio Aguado, si finalmente es confirmado como candidato de Ciudadanos en 2019, tendría la posibilidad de elegir al PP o al PSOE como compañero de investidura y de gobierno. Ambas sumas superan holgadamente la mayoría absoluta: Ciudadanos y PP reunirían 74 diputados; Cs y PSOE, por su parte, sumarían 69 escaños.

Fuga de votos a Ciudadanos

De los datos relativos al trasvase de votos entre las cuatro principales formaciones se desprende que el PP es el partido que sufre una mayor desbandada: apenas el 63,3% de los que respaldaron con su voto a Cristina Cifuentes en 2015, volverán a apoyar a los populares. Una cuarta parte de sus votantes –el 25,6%–, sin embargo, apuntalaría la victoria de Ciudadanos y un 7,3% se abstendrán. El perfil «moderado» de Gabilondo no convence al simpatirzante del PP: sólo el 1,2% de sus antiguos votantes pasaría a apoyar al PSOE en unos nuevos comicios.

La candidatura de Ciudadanos, por contra, es la que más fieles conserva respecto a las últimas autonómicas. Un 82,9% de los que apostaron por Aguado como candidato repetiría esta opción ahora. Apenas un 3,1% de los que fueron sus votantes en 2015 se pasaría ahora al PP, mientras que otro 2,8% haría lo propio con el PSOE.

Gabilondo, como cabeza de cartel socialista, conseguiría retener al 64,7% de aquellos que ya escogieron su papeleta en 2015. Sin llegar a sufrir una fuga de votos hacia Ciudadanos tan masiva como la que experimenta el PP, el PSOE también vería cómo el 15,7% de sus votantes apoyaría ahora a Aguado como presidente. En Podemos, por último, el 70,3% de sus votantes repetiría ahora. Errejón sí se vería beneficiado por el trasvase de un 4% de antiguos votantes socialistas y de un 9,1% procedente de Izquierda Unida. La posibilidad de que la formación de Iglesias e IU finalmente confluyan en una única lista acercaría tanto en votos como en número de escaños a Podemos y al PSOE.

En el reparto de apoyos por tramos de edad, el Partido Popular se mantiene como la opción favorita entre los madrileños mayores de 45 años. Para los más jóvenes –de 18 a 29 años–, la lista ganadora, con el 14,3% del total, es Ciudadanos. La formación naranja consigue además ser la candidatura con un nivel de apoyo más regular en todos los tramos de edad: 16,5% entre los madrileños de 30 a 44 años; el 16% de los que tienen entre 45 y 64 años y el 15,5% de apoyo en la franja de más edad, la que integran los mayores de 65 años.