Madrid

Cobardía y teatro

La Razón
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En el año 2011, dos testigos del asalto a la capilla de la Complutense declararon que quien estaba detrás del ataque era un tal Pablo Iglesias; que Iglesias era el «director escénico» y sus alumnas, las actrices. Estos hechos nos dan idea de varias cosas. Primero, del error de cálculo del «mesías», y es que, como declaró el día de las detenciones el vicedecano de alumnos, Ariel Jerez , hechos de este tipo siempre habían sido considerados faltas. Por eso Rita Maestre dijo hace días que ella nunca creyó que fuera delito, y es que se fió de lo que el «mesías» le dijo. Segundo, de la cobardía de Iglesias, que ha sido incapaz de asumir su culpa, dejando que jóvenes estudiantes cargaran con todas las responsabilidades. Los testigos acreditan que primero entraron las mujeres y que los chicos iban al final de la procesión, sosteniendo éstos actitudes pasivas en el acto.

Así, Pablo Iglesias se nos define como el Capitán Araña. Tercero, de su machismo innato. Y es que este tipo de personas siempre instrumentalizan el cuerpo de la mujer para sus intereses propios. Pero todo esto nos ha descubierto más, y es que Iglesias era director del Grupo de Teatro Político Antígona, donde enseñó a actuar a sus alevines. Por eso incumplen sus promesas electorales, como no mantener a imputados, y es que como cantaba La Lupe en su bolero, «teatro, lo tuyo es puro teatro, falsedad bien ensayada». Los tuits en los que se ríen de niñas violadas demuestran su ausencia de empatía. Como la indiferencia ante los ataques de ansiedad que sufrieron las chicas que rezaban en la capilla, y que no le causan dolor alguno a Carmena.

Por eso, ya hemos descubierto que cuando gritan con voces miserables por la precariedad laboral o los desahucios, sólo fingen dolor barato. Conviene recordar que Hitler tomo clases de teatro con Paul Devrient. Todos estos de Podemos las tomaron con Pablo Iglesias, que nos toma a todos el pelo. Su verdad: sólo saben mentir y actuar.

*Presidente del Centro Jurídico Tomás Moro