El PP confía en que la amnistía les dé fuerza de cara a la investidura

El PP recibe como una suerte de impulso el nuevo giro discursivo de Pedro Sánchez. Desde Nueva York, allanó este miércoles el camino para abrir paso a un horizonte en el que la amnistía a los líderes independentistas sea una realidad. Los populares tomaron con cierto asombro la comunicación del presidente del Gobierno en la que rechazaba la vía judicial contra Carles Puigdemont, todo en vías de la negociación de su investidura.

Con esos mimbres, en Génova quieren capitalizar la rentabilidad de la controversia que genera la posibilidad de borrar el delito que cometieron los líderes independentistas. Ven munición política en la nueva defensa de Sánchez de sus conversaciones previas con Junts y ERC y quieren aprovecharlo de cara a la manifestación de este domingo y del pleno de investidura de Alberto Núñez Feijóo toda la crítica que se está generando tanto en la esfera política –con el socialismo histórico a la cabeza– como en la calle, según se expresan fuentes populares. Según contemplan en Génova, «hay un clamor en la calle y tenemos que responder». Los populares se impulsan ante el hecho de que haya socialistas que se «atrevan a hablar por primera vez».

El partido cree que ante la imagen de un PSOE que está dispuesto a «vender España», Feijóo podrá presentarse como la alternativa a ese rumbo, a pesar de que no supere el proceso de investidura. Miran un paso más allá, de cara al futuro, tras unas nuevas elecciones generales. Los populares creen que las polémicas a las que se enfrenta Sánchez para «perpetuarse en el poder» les ayuda a construir el camino a la «alternativa». Ven una oportunidad de oro en la próxima semana en el pleno del Congreso, la posibilidad de que su presidente pueda explicar su proyecto político y las «otras opciones» al gobierno de Pedro Sánchez.

De hecho, fuentes populares apuestan por continuar con un discurso de confrontación directa a los futuros pactos –que en el PP dan por hecho– de Sánchez con ERC y Junts con el fin de mostrar las diferencias entre Sánchez y Feijóo. También radica en esta razón el hecho de que ayer el portavoz Borja Sémper se subiera a la tribuna para pronunciar un discurso completamente en castellano. «No era día de hacer florituras, sino de solemnidad discursiva», se explican en su entorno.

En Génova preparan ya la estrategia de cara a la investidura de Feijóo. La amnistía será uno de los ejes fuertes del discurso del candidato. Ayer ya dejó algunas píldoras que iniciaban el camino. Con la posibilidad real de ceder a los independentistas, Feijóo ve ahora su investidura «imprescindible», recordando que se encuentra a cuatro votos de superar el proceso. El fin es hacerse valer como partido que rechaza las cesiones a quienes trataron de tomar el camino para la autodeterminación. «Estamos ante un punto de inflexión en la historia democrática», denunció al considerar que Sánchez habla «abiertamente de la posibilidad de una amnistía en favor de todos aquellos que delinquieron contra la democracia española». En el PP se presentan como partido que no tiene compromiso «con nadie, salvo con la libertad, la unidad y la igualdad de los españoles» frente, explican, a los «compromisos» que debe «pagar» Sánchez para «mantenerse» en el Gobierno. «¿Justifica el poder el pago de cualquier precio», se preguntó Sémper en su intervención cuando defendió el «no» de su partido al uso de las lenguas cooficiales.

Según Feijóo, en una comparecencia a medios tras la aprobación de la modificación del Congreso de los Diputados para instaurar las lenguas cooficiales en la Cámara Baja, Sánchez ha cometido un «fraude electoral» al presentarse a las elecciones con la promesa de que la amnistía «no cabe en la Constitución» y, ahora, no cerrarle la puerta. «Lo que transmitió (Sánchez), como todo el mundo sabe, va contra la Justicia, contra la Constitución, contra la división de poderes y contra él mismo», denunció.

Al igual que ya hizo el exvicepresidente del Gobierno, Alfonso Guerra, este jueves, Feijóo coincidió con él y criticó que el acuerdo para la amnistía es «la condena de la democracia». Censuró que no hay un presidente del Gobierno que «haya engañado tanto a la nación».

De cara a la protesta contra la amnistía de este domingo, fuentes populares explican que la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y el alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, abrirán la manifestación con un «saludo» inicial, en deferencia a celebrarse la cita en Madrid. Al acto, como ya publicó este diario, acudirán los expresidentes del Gobierno, José María Aznar y Mariano Rajoy, así como barones autonómicos populares, aunque no intervendrán. El objetivo de los populares es defender «con tranquilidad, con sosiego y con cordialidad» en el acto y en la investidura, según abundan en el Partido Popular.

En el PSOE, sin embargo, recelan de esta estrategia y confían en que, en vez de ofrecer cohesión entre el votante popular la manifestación del domingo, ésta acabe «movilizando» a los socialistas. «El PP siempre se pasa de frenada», resumen fuentes socialistas, que recuerdan que Zapatero tuvo «muchas manifestaciones» y sacó «sus mejores resultados» en 2008 a pesar del clamor social de descontento, en medio de la crisis económica del momento.