«Cuando uno lleva desfilando seis u ocho horas es cansado, pero ves a la gente ovacionando al Cristo y se te pasa»

El capitán Sergio Domínguez Sierra, es Jefe de la 1ª compañía de la IV bandera de la Legión (BLEG). Embarcó ayer en Ceuta con sus hombres para pasar la noche a bordo del Contramaestre Casado, el buque de la Armada que los ha llevado a los legionarios hasta Málaga para que puedan realizar su tradicional procesión del Cristo de la Buena Muerte.

Estuvo destinado de Teniente durante cinco años en el primer Tercio Gran Capitán de la Legión y comandó piquetes de varias procesiones durante Semana Santa en Antequera, Córdoba, Melilla y Cabra. Pasó un año en Jaca, en la Escuela Militar de Montaña y Operaciones Especiales, donde se diplomó en Alta Montaña.

Ayer por la tarde ensayaron sobre la cubierta el desembarco de Málaga y hoy, a pocas millas de la costa, le pregunto sobre el espíritu legionario, el trabajo que implica la procesión y los actos durante la Semana Santa y cómo han pasado la noche a bordo del buque, porque hemos tenido una mar complicada…

¿Cómo han pasado la noche a bordo con tanto movimiento del buque?

La travesía en el buque ha sido movida, como bien ha visto. Hemos contado con 30 nudos de levante y olas de hasta tres metros. Eso a provocado que gran parte de la unidad se marease a lo largo de la noche. Aun así, no ha sido una travesía dura, porque uno se duerme y ya, pero lo vamos a notar en el resto de las actividades. El mareo le ha quitado fuerza a la gente y lo vamos a pagar durante el día, aunque el espíritu legionario sea fuerte.

¿Cómo ha sido la preparación de los distintos actos en los que participan durante Semana Santa?

Hemos empezado con todo lo que es la preparación de Semana Santa hace dos semanas, con ensayos de desfiles. El Domingo de Ramos hicimos un pasacalle y un desfile con la burriquita en Ubrique, el lunes estuvimos en Algeciras acompañando al Cristo de la Columna, el martes hicimos un desfile en Ceuta y ayer empezamos los ensayos del embarque en el Contramaestre Casado, donde embarcamos el mismo día.

¿El embarque de este año ha sido diferente a los anteriores?

Si, es una novedad. Es la primera vez que se hace un embarque marcial de la compañía de honores. Lo que se ha intentado es llegar a todos los ciudadanos de Ceuta, que es donde reside el Tercio Duque de Alba. Al igual que en Málaga y gran parte de España tiene la posibilidad de ver el desembarco, hemos hecho este acto emotivo para que los ceutíes puedan verlo en su ciudad, que también es la del Tercio.

Y para este traslado a Málaga y la procesión del Cristo ¿Qué ha tenido de especial su preparación?

Esto es totalmente distinto. Hay que tener en cuenta que cada desfile procesional es parecido, la única diferencia es que en el de Málaga es que la unidad llega embarcada y eso precisa de una preparación adicional.

¿Cuál es la mayor dificultad que encuentra en todo este operativo?

Dificultad como tal no hay ninguna. Pero es cierto que la combinación de dos unidades de las Fuerzas Armadas y las diversas jerarquías de mando hacen que me lleguen muchos requerimientos de varias personas y mi trabajo consiste es gestionarlo para obtener un resultado esperado. Al final hay que saber delegar y no llegar a la micro gestión para no volverse loco.

Cada año procesiona una unidad distinta ¿Cómo se decide?

Cada año se monta un piquete de honores, que en este caso es una compañía de honores, que está formada por la Banda de Guerra, Escuadra de Gastadores, y la banda de Música, que se incorpora en Málaga. Cada año le toca a una unidad de la Legión, puede ser a cualquiera de los cuatro tercios y batallones, como el de caballería o zapadores. Cada Coronel, junto al Teniente Coronel Jefe de la Bandera elige a un capitán, y el capitán con su compañía monta el piquete de la Semana Santa.

Ahora que estamos a pocas horas de tocar puerto en Málaga, ¿Hay nervios? ¿Qué pensamientos le vienen a la cabeza?

Hay sentimientos, pero no son de nervios sino de orgullo. Es muy bonito que los malagueños nos acojan de esa manera. Cuando uno lleva desfilando seis u ocho horas es cansado, pero cuando vas pasando por diferentes sitios y ves a la gente ovacionando al Cristo, se pasa rápido gracias al apoyo de la gente.

¿Qué piensa la familia?

Cada familia quiere ir a ver a su legionario porque para ellos es un orgullo. Ver que todo el mundo les da ánimos y el cariño es una sensación brutal para el legionario y su familia.

Es su primer traslado y procesión del Cristo de la Buena Muerte, pero seguro que ha estudiado todos los movimientos…

Me he visto todos los vídeos desde 2015 y espero no cometer pequeños errores que ocurren, como se suele decir, por el directo, aunque son normales. Seguro que cometeré algunos, aunque intentaré que no sea así.

Han planificado todo al milímetro, cuando estén desfilando ¿dará tiempo a disfrutarlo o estarán enfocados en portar al cristo?

Desde que desembramos hasta la plaza de Santo Domingo como vamos a paso ordinario específico de la Legión estamos acostumbrados y lo vamos disfrutando. Ahora sí, una vez llegamos a la entronización personalmente no disfruto tanto porque estoy más pendiente de que todo salga bien. La geste si lo disfruta, pero el jefe, que en este caso soy yo, tiene que estar pendiente de que todo salga bien más que de lo que haya alrededor. Ahí uno se enfoca en que todo salga bien.

Durante la procesión, es donde se siente realmente el fervor y la emoción de la gente. Solo hay que procesionar marcando el pisotón siguiendo los acordes de la banda, que es desfilar a paso lento, y dentro de lo que cabe es algo sencillo. Pero hasta que no empieza el desfile después del desembarco no nos damos cuenta de la suerte que tenemos.

El Jueves Santo es un día frenético para ustedes, pero ¿una vez finalizada la procesión a las cuatro de la mañana hay tiempo para descansar?

Sobre las cuatro de la mañana iremos a la residencia en la que vamos a dormir y tomaremos algo caliente, comeremos algo y a las a las siete de la mañana tenemos que subir a los autobuses que nos llevarán a Alcalá del Rio, porque a las diez y media de la mañana tenemos un desfile que durará hasta las once de la noche.