Ejercicio militar

La Armada saca músculo y despliega de nuevo el Grupo de Combate Dédalo en el Mediterráneo, el Atlántico y el Báltico

Lo componen el LHD Juan Carlos I, el buque de asalto anfibio Galicia, las fragatas Blas de Lezo y Reina Sofía., aviones AV-8B+ Harrier, helicópteros y un Batallón Reforzado de Desembarco de Infantería de Marina

Un Harrier sobre la cubierta del LHD Juan Carlos I junto a otro buque de la Armada
Un Harrier sobre la cubierta del LHD Juan Carlos I junto a otro buque de la Armada Armada

Ha dado comienzo un nuevo despliegue del Grupo Expedicionario de Combate Dédalo por el Mediterráneo y el Atlántico, que se prolongará hasta mediados del mes de julio, después de los llevados a cabo en febrero y octubre del pasado año. Participan los buques del Grupo Anfibio y de Proyección de la Flota, el LHD Juan Carlos I y el buque de asalto anfibio Galicia, aviones AV-8B+ Harrier, varios helicópteros, un Batallón Reforzado de Desembarco de Infantería de Marina y las fragatas Blas de Lezo y Reina Sofía. El mando recae de nuevo en el contralmirante Gonzalo Villar.

Este tipo de despliegues sirven para mostrar la capacidad de la Armada para liderar y proyectar una fuerza expedicionaria en y desde la mar y en su caso integrar a otras unidades o agrupaciones en un Grupo de Combate de un país de la Alianza bajo Mando Nacional. De hecho, en anteriores despliegues participaron también submarinos o el buque de aprovisionamiento al combate Cantabria.

El Grupo se desplegará en un principio por todo el Mediterráneo para contribuir al fortalecimiento de la seguridad marítima en esta región, clave para la seguridad española. A lo largo de más de mes y medio trabajará codo con codo con países socios y aliados como Francia, Italia, Grecia y Turquía. También apoyarán la Operación Sea Guardian de la OTAN en la lucha contra la amenaza del terrorismo transnacional.

De entre todas las acciones que llevará a cabo el desplliegue español destaca la participación en el Mar Mediterráneo en las actividades de vigilancia reforzada de tiempo de paz Neptune Strike de la OTAN. Durante 15 días el Grupo Dédalo permanecerá bajo el mando militar de la Alianza, y sus Harrier, junto con los aviones de los demás portaaviones participantes, llevarán a cabo, además de las tradicionales misiones para garantizar la superioridad en la mar, otras de apoyo a los contingentes desplegados en los países del Este de Europa, incluyendo a las tropas que el Ministerio de Defensa está estableciendo en Eslovaquia para fortalecer la disuasión de la Alianza.

Llama la atención el impresionante poder naval que se podrá llegar a ver, pues navegarán de forman conjunta los portaaviones estadounidenses Dwight D. Eisenhower y Theodore Roosevelt; el francés Charles de Gaulle y el italiano Cavour, además del español Juan Carlos I y su gemelo turno Anadolu, el portaaeronaves de la marina turca diseñado y ejecutado por Navantia.

Durante el resto de su permanencia en el Mediterráneo, el grupo expedicionario español realizará una intensa actividad para fortalecer su interoperabilidad con los países ribereños. Así, participará en el ejercicio Mare Aperto, organizado por Italia, y dedicará períodos para operaciones anfibias bilaterales con Grecia y Turquía, respectivamente.

A finales de mayo, tras una breve escala logística en la Base Naval de Rota, comenzará la fase atlántica: se dirigirá a Gijón, donde participará en las actividades del Día de las Fuerzas Armadas, que este año tendrá su acto central en Oviedo.

El evento más importante de esta segunda mitad del despliegue será la presencia en el Báltico para participar en el ejercicio multinacional BALTOPS 24, el más multitudinario de los que se realizan en esta zona y el primero tras la reciente adhesión a la OTAN de Finlandia y Suecia.

Precisamente, el fomento de la interoperabilidad con los países ribereños es otro de los ejes de la presencia del Dédalo 24 en el Báltico, aunque también se aprovechará para interactuar con los contingentes aliados desplegados en la región, en particular, con las tropas del Ejército de Tierra en Estonia y Letonia y el destacamento del Ejército del Aire y el Espacio en Lituania.

El pasado año el grupo Dédalo participó durante ocho días en operaciones de ayuda humanitaria a la población turca afectada por el terremoto del mes de febrero, entre otras misiones. Asimismo, se trabajó en actividades de vigilancia reforzada sobre el flanco este de la OTAN Neptune Strike y su liderazgo en las primeras maniobras de la Unión Europea MILEX 23, hito fundamental para la creación de la futura fuerza de respuesta europea en los próximos meses.