Fuerzas Armadas
Cascos azules españoles continúan trabajando en la mejora de las condiciones de vida en el Líbano
Sanitarios militares del contingente español han llevado a cabo una jornada de atención médica y distribución de medicamentos a la población local
El cometido de los cascos azules desplegados en el Líbano, como parte de la misión de las Naciones Unidas UNIFIL (United Nations Interim Force in Lebanon), no se limita a funciones defensivas o estrictamente militares, sino que también incluye una labor social. Su presencia busca mejorar las condiciones de vida de la población en una zona crítica, marcada por la inestabilidad y los conflictos constantes. En línea con este propósito, miembros del equipo médico de la Brigada Líbano (BRILIB), junto a militares salvadoreños encuadrados en la misma unidad, han participado en una jornada de asistencia sanitaria en el pueblo de Aarab el Wazzani, una pequeña localidad muy cercana a la base española.
Durante la jornada, alrededor de 70 vecinos de la localidad, entre hombres, mujeres y niños, recibieron atención médica personalizada. Además de las consultas, el equipo sanitario ha distribuido medicamentos, garantizando un servicio de mayor calidad y asegurando la continuidad de la asistencia proporcionada, según ha informado el Estado Mayor de la Defensa.
Mejora en las condiciones de vida y fortalecimiento de vínculos
Esta actividad, que ha contado con una amplia participación de población local, no solo pretende mejorar las condiciones de vida de los habitantes a través de la mejora de la mejora sanitaria; sino también fortalecer los vínculos entre los cascos azules y la comunidad libanesa. La cooperación entre la ciudadanía y las fuerzas de paz ayuda a favorecer el entendimiento mutuo, y respalda la labor de los militares presentes, pues permite a los residentes percibir su presencia como una signo de la mejora de calidad de vida en la zona, generando así mayor confianza en ellos.
Esta iniciativa se suma a otras acciones que desarrolla el contingente español, tanto en el ámbito civil, como la construcción de carreteras e infraestructuras dañadas por la guerra, como en el militar, por ejemplo, la desactivación de explosivos y la formación continua de las Fuerzas Armadas Libanesas (LAF). Todos estos esfuerzos se enmarcan dentro del mandato de la ONU, cuyo principal objetivo es mejorar la seguridad y las condiciones de vida en la región, mediante una presencia continua que se ha convertido en indispensable a lo largo de los años.
El papel de España en el Líbano
Las fuerzas Armadas españoles están presentes en el Líbano desde septiembre de 2006, con una base principal en Marajyoun, sede del Cuartel General del Sector Este de UNIFIL, bajo liderazgo español. Además, también hay tropas españolas presentes en el cuartel general de la misión en Naqoura. Su labor abarca tanto tareas militares como proyectos de cooperación comunitaria y reflejan el compromiso de nuestro país con la paz y el bienestar regional.
Todo esto curre en un contexto frágil, donde meses atrás los enfrentamientos entre Hizbulá e Israel obligaron a la bunkerización del contingente español. Una situación que, con el tiempo, ha ido mejorando, pese a la inestabilidad que caracteriza a la región. Así lo explicó en una entrevista reciente a La Razón, el general de brigada Ricardo Esteban Cabrejos, jefe del Sector Este de la misión de la ONU, al mando de 3500 efectivos de nueve países, entre ellos 670 españoles.