Maniobras

Los cazas Eurofighter españoles se enfrentan a los F-35 de EE UU en Alaska

Los aviones de combate del Ejército del Aire participan en el ejercicio con fuego real «Arctic Defender», el primero de su vuelta al mundo con Francia y Alemania

Formación de cazas sobre Alaska vista desde un Eurofighter español
Formación de cazas sobre Alaska vista desde un Eurofighter españolEjército del AireEjército del Aire

Primer gran reto de la agrupación del Ejército del Aire que se encuentra inmersa en una inédita vuelta al mundo con aeronaves francesas y alemanas. Y es que desde ayer, en el marco de la iniciativa «Pacific Skies», los cazas y aviones españoles participan en una de las maniobras más exigentes de este despliegue: el ejercicio «Arctic Defender» en Alaska (Estados Unidos), el único de los tres en los que tomarán parte en el que se adiestrarán con fuego real y con cazas de quinta generación, como los F-35 y F-22 estadounidenses.

Organizado por las fuerzas aéreas germanas, en estas maniobras que se prolongarán hasta el próximo día 17 participan alrededor de 500 efectivos y más de 60 aeronaves, entre ellas cuatro cazas Eurofighter y tres aviones de transporte (dos A400M y un A330) españoles, los cuales forman la bautizada como Agrupación «Plus Ultra».

Formación de aviones europeos y de EE UU que participan en las maniobras
Formación de aviones europeos y de EE UU que participan en las maniobrasEjército del AireEjército del Aire

Tal y como explica el Ejército del Aire en un comunicado, «el ejercicio ‘‘Arctic Defender’’ tiene como objetivo mejorar tanto las capacidades tácticas de las unidades participantes como la interoperabilidad entre ellas», uno de los principales objetivos de este despliegue por todo el mundo, además de promocionar la industria de defensa comunitaria, pues los aviones de los tres países son europeos.

Combates realistas

En concreto, se trata de un ejercicio tipo «Red Flag», es decir, «una simulación de combates entre dos fuerzas aéreas contrincantes, donde los participantes entrenan situaciones con el mayor realismo posible, incluso con empleo de armamento real en determinadas misiones».

De esta forma, los pilotos de los ejércitos participantes se preparan «para enfrentarse a cualquier enemigo potencial, capacitándolos para operar en todos los escenarios, por muy alejados que se encuentren y ante cualquier amenaza, por compleja que sea», detalla el Ejército del Aire.

El Ejército del Aire arranca hoy en Alaska un ejercicio con armamento real en el marco del despliegue 'Pacific Skies'
El Ejército del Aire arranca hoy en Alaska un ejercicio con armamento real en el marco del despliegue 'Pacific Skies'Europa Press

Durante la primera jornada, en la que recibieron la visita del jefe del Mando Aéreo de Combate, teniente general Francisco González-Espresati Amián, y delministro de Defensa alemán, Boris Pistorius, se habituaron al terreno para, posteriormente, practicar la eliminación de defensas o centros de mando enemigos con munición guiada y llevar a cabo combates aéreos.

Se trata de un exigente ejercicio que «reproduce diversos escenarios desafiantes», con un «ritmo de batalla muy demandante». Y se desarrolla en uno de los campos de maniobras más grandes del mundo, el «Joint Pacific Alaska Range Complex», un espacio aéreo de una extensión aproximada de unos 300.000 kilómetros cuadrados, más de la mitad de la extensión de toda la Península Ibérica, detalla la fuerza aérea española.

Los cazas españoles lanzarán una veintena de bombas guiadas por láser durante el ejercicio

Durante los días que duren estas maniobras realizarán todo tipo de misiones, a cual más exigente, y practicaran arriesgadas maniobras, como vuelos a baja altitud, claves para evitar ser detectados. Y el terreno de Alaska es idóneo para ello.

Munición guiada

Los Eurofighter españoles lanzarán unas 24 bombas guiadas por láser GBU-16 a lo largo de las más de 80 horas de vuelo y 40 salidas previstas. De hecho, durante dos días, el Ejército español liderará el planeamiento de las misiones y durante otras dos jornadas los combates aire-aire.

Y junto a las aeronaves europeas, los cazas estadounidenses de última generación F-22 y F-35. Este último es el avión de combate deseado por las Fuerzas Armadas españolas, sobre todo por la Armada en su versión naval (B), pues a día de hoy es la única opción existente en el mercado para sustituir a los «Harrier» que operan desde el portaaeronaves «Juan Carlos I» y que están cerca de cumplir su vida útil.

Vuelta al mundo Fuerzas Armadas
Vuelta al mundo Fuerzas ArmadasTania NietoLa Razón

En este primer ejercicio participan personal y medios del Ala 14, Ala 31, Escuadrón de Apoyo al Despliegue Aéreo (EADA), Unidad Médica Aérea de Apoyo al Despliegue, Centro Logístico de Armamento y Experimentación, Dirección de Asuntos Económicos, Jefatura de Movilidad Aérea y Mando Aéreo de Combate. Un importante despliegue de efectivos y capacidades en un lugar tan remoto que es otro de los objetivos de esta vuelta al mundo: demostrar la capacidad de España y sus aliados para proyectar con éxito una fuerza aérea en cualquier lugar del mundo que se requiera y en cualquier momento. Un mensaje de disuasión con un claro destinatario, Rusia, aunque no lo nombren directamente.

Pero además, en este ejercicio también se pondrá a prueba la interoperabilidad entre naciones aliadas, sobre todo entre las tres desplegadas en «Pacific Skies», pues no solo comparten muchas de las aeronaves, sino que en este despliegue el mantenimiento de las mismas se lleva a cabo de forma compartida. «Servirá para intercambiar experiencias y armonizar tácticas y procedimientos», destaca el Ejército español.

Una vez completado este ejercicio, las aeronaves españolas, francesas y alemanas iniciarán uno de los tramos más exigentes y largos de su recorrido, el que les llevará desde Alaska a Japón, a donde llegarán bordeando el espacio aéreo de Rusia. Tal y como confirmaron cuando presentaron este reto, tienen claro que los cazas rusos saldrán a su encuentro para identificarles y tratar de intimidarles.