Defensa exige "avances" a los fabricantes del blindado 8x8 del Ejército

En su discurso con motivo de la Pascua Militar, ante el Rey, la ministra de Defensa, Margarita Robles, lanzó un pequeño dardo en forma de crítica a Tess Defence, el consorcio formado por Escribano Mechanical & Engineering, Indra, Santa Bárbara y Sapa) encargado de fabricar la primera tanda de los blindados 8x8 "Dragón"para el Ejército de Tierra. Ese día, tras dejar claro que es un programa "esencial", avisó de que "nos gustaría que presentara en su ejecución mayores avances de los apreciados hasta la fecha". Y esta mañana, esa crítica se la ha trasladado en persona a los representantes de dichas empresas, a quienes ha transmitido su "gran preocupación por la falta de avances y por el nivel de cumplimiento del programa".

Es lo que les ha manifestado esta mañana Robles, acompañada por la secretaria de Estado de Defensa, Amparo Valcarce, a los CEO de dichas empresas (Juan Escriña, de Santa Bárbara; Jose Vicente de losMozos, de Indra; Ángel y Javier Escribano, de Escribano, e Ibon Aperribay, de Sapa), con quienes se ha reunido en la sede del Ministerio. A todos ellos les ha recordado que este es un programa "esencial para el Ejército de Tierra", que únicamente recibió, hace apenas un año, las primeras siete unidades de producción para comenzar a probarlas.

Y es que el programa del Vehículo de Combate sobre Ruedas (VCR) 8X8 "Dragón" nació hace ya más de 16 años y en todo este tiempo ha tenido que superar numerosos contratiempos, incluida una suspensión inicial de cinco años por falta de fondos, además de retrasos de todo tipo. Y ahora, tras la llegada de esas primeras siete unidades, no se ha vuelto a saber nada más allá de una nueva reprogramación de los plazos de entrega.

Por ello, la ministra ha querido reunirse con los fabricantes para transmitirles su "gran preocupación por la falta de avances y por el nivel de cumplimiento del programa". De ahí que no haya dudado en reclamarles "la contratación de mayor capacidad de ingeniería y aumentar el ritmo de producción, incluyendo una nueva línea de producción en la fábrica de Trubia". Además, también ha exigido "agilizar las entregas del grupo motopropulsor de Sapa, las torres de armas de Escribano y el software del sistema de misión de Indra".

Esos siete primeros blindados forman parte de una primera fase del programa, que incluye un total de 348, que irán llegando, en principio, hasta 2027. De avanzar todo como está marcado, se desarrollarían otras dos fases más hasta alcanzar los 998 vehículos «Dragón» con cinco versiones y hasta 13 configuraciones: Vehículo de Combate de Infantería (219 unidades), de Exploración de Caballería (58), de combate de Zapadores (49), de Puesto de Mando de Batallón (14) y de Combate de Observador Avanzado (8).

No es la primera vez que Robles apremia a la industria ante los numerosos retrasos en los programas de armamento. Los últimos en recibir un tirón de orejas suyo fueron los responsables de Navantia el pasado septiembre. Entonces dejó claro que no aceptaría "ningún retraso más" de cara a la entrega a la Armada del primer submarino S-80, el S-81 "Isaac Peral", el cual se entregó a finales de noviembre.