Del ISN Drakon de Israel al Tipo 214 alemán: los submarinos que compiten contra el español S-80 en el mercado internacional

En la industria militar, muchas son las armas utilizadas y presentadas que convierten a los diferentes países como potencias militares. En el ámbito naval, las autoridades de muchos países se han volcado en la obtención de nuevas unidades de submarinos que les haga ganar músculo e imponerse por los mares y océanos, adaptándose a los nuevos tiempos. El S-80 español, buque estrella de Navantia, es un firme ejemplo de embarcaciones modernas, contando con un gran poderío, pero no es el único que quieren los compradores extranjeros y la competencia es bastante grande e importante.

Mientras países como India, Filipinas, Canadá o Polonia ya se presentan como potenciales compradores y están inmersos en un proceso para dotarse de las mejores embarcaciones, distintas empresas de Alemania, Suecia o Israel, entre otras, buscan adelantar a Navantia en la carrera por las ventas internacionales. Y cuentan con un punto a favor -o en contra de España-, y es que los retrasos en el innovador sistema de propulsión de la embarcación española podrían perjudicarla, una debilidad que podrían aprovechar otros países.

El submarino S-80 cuenta con una eslora total de 80,81 metros, y un diámetro de 7,3 metros. Entre sus capacidades, que le permiten el mejor desarrollo de sus misiones, destacan, además de su Sistema de Combate, la capacidad de transporte de personal, firmas magnética, acústica, radar e infrarroja, movilidad operacionales y el sistema de propulsión independiente del aire (AIP) que le asegure la permanencia en zona de una manera discreta.

Su Sistema de Combate incluye la capacidad de lanzamiento de misiles de intervención en tierra a larga distancia, además de medios de detección visuales, optrónicos y electromagnéticos. También medios de ayuda a la navegación, torpedos pesados de doble propósito y largo alcance, misiles antibuque y minas, así como sensores acústicos de corto, medio y largo alcance.

Es una breve descripción de lo que puede aportar el submarino español, características muy suculentas para cualquier comprador internacional. Pero la oferta del resto de países no es baladí y podrían arruinar la operación de Navantia. Estos son solo algunos ejemplos de las mejores bazas extranjeras:

Submarinos U212 NFS, la joya de la Marina Militare Italiana

Hace apenas unos meses, el Gobierno de Italia aprobó la inversión de 500 millones para la construcción de la tercera unidad de sus nuevos submarinos U212 NFS, rivales directos del S-80 español y con los que quiere afianzar su poderío naval. Mientras, los dos primeros se entregarán en 2027 y 2029 respectivamente.

Italia ha apostado fuerte por sus fuerzas armadas en su afán de convertirse en la primera potencia del Mediterráneo. La construcción de estas embarcaciones se hará a través de la OCCAR (Organisation Conjointe de Coopération en Matière d'Armement), la organización internacional de ámbito europeo cuya actividad principal es la gestión permanente de programas cooperativos de defensa, y la llevará a cabo el gran constructor naval italiana Ficantieri.

Los submarinos U212NFS son variantes mejoradas de los cuatro de propulsión independiente del aire (AIP) Tipo 212 que ya están en servicio en la Marina. Incorporarán más tecnología de la industria de defensa italiana, entre lo que está un nuevo sistema de gestión de combate (CMS). Además, estará equipado para el despliegue de misiles de crucero de ataque profundo de largo alcance y los torpedos avanzados Black Shark de Leonardo. Estos sistemas también ofrecerán la posibilidad de adaptarse a los barcos anteriores.

ISN Drakon, poderío israelí para dominar el Mediterráneo

Israel siempre ha sido un país interesado en ser dueño y señor del Mediterráneo, un anhelo que se ha convertido en necesidad debido al panorama geopolítico actual, pues el estallido de la guerra en Oriente Medio ha hecho que sea obligatorio tener vigilados a sus enemigos y, para ello, los sumergibles juegan un papel fundamental.

Según TKMS, compañía alemana, el ISN Drakon se trata de un sumergible de la clase Dolphin 2, estamos ante "un diseño completamente nuevo, que será desarrollado específicamente para cumplir con los requisitos operativos de la Armada israelí".

El INS Drakon es más grande que cualquier submarino israelí anterior y mucho más largo que los dos primeros barcos Dolphin-II. Podría albergar un sistema de lanzamiento de misiles vertical, una característica poco habitual y que dotaría al buque de una gran capacidad ofensiva.

Tipo 214, músculo para la fuerza naval de Alemania

Bien es sabido que, donde haya fuerzas militares, ahí está Alemania. Así, presenta a sus submarinos Tipo 214 construidos por la alemana Thyssenkrupp Marine Systems. Al igual que el S-80, es una embarcación que, al igual que el S-80, está equipado con un sistema de propulsión independiente de aire (AIP) que le permite permanecer sumergido durante un tiempo prolongado.

La compañía asegura que el Tipo 214 es capaz de navegar a mayores profundidades y puede portar una amplia variedad de armamento.Cuenta con ocho tubos lanzatorpedos de 533mm por los que, además de torpedos, se pueden lanzar misiles antibuque y minas.

El submarino alemán destaca por un casco único, optimizado para dejar una menor huella que dificulta que sea detectados por sonares enemigos.

Expeditionary C-71, fruto de la alianza entre Suecia y Países Bajos

La compañía neerlandesa Damen y la sueca Saab han diseñado conjuntamente Expeditionary C-7. De acuerdo a sus fabricantes, el Expeditionary incorpora las últimas tecnologías y, gracias a su diseño modular, puede ser personalizados de acuerdo a los requerimientos y necesidades del cliente.

Está desarrollado en base a los submarinos A26 ideados por Saab, que actualmente construye dos de estos buques -que también cuentan con AIP- en beneficio de la Marina de Suecia. Actualmente, Suecia, Australia, Japón y Singapur operan submarinos con tecnología de Saab.

Dosan Ahn Changho (KSS-III), la apuesta de Corea del Sur

De acuerdo con la agencia coreana de noticias Yonhap, el submarino KSS-III es el segundo buque construido bajo el programa Changbogo-III Batch-I diseñado para producir tres submarinos de 3.000 toneladas y 83 metros de largo capaces de transportar a cincuenta tripulantes.

Cuenta con capacidades reforzadas para realizar misiones submarinas encubiertas y ataques de precisión. El submarino también cuenta con las últimas tecnologías de reducción de vibraciones y ruido, así como un sistema avanzado de combate y sonar. Puede alcanzar una velocidad de 22 km/h en la superficie y 37 km/h sumergido.

La clase de submarinos Dosan Ahn Changho incorpora el Sistema de Lanzamiento Vertical que podrá transportar hasta diez misiles de crucero de ataque terrestre y misiles balísticos lanzados desde submarinos (SLBM por sus siglas en inglés), lo que los convierte en los primeros submarinos de la marina coreana con esta capacidad.