Robles defiende desde Finlandia la labor de disuasión de la OTAN frente a Rusia

La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha querido poner en valor hoy desde Helsinki (Finlandia) la disuasión que ejercen las fuerzas de la OTAN como respuesta a la amenaza de Rusia. Lo ha dicho durante la visita que ha hecho a la fragata "Almirante Juan de Borbón", la cual está al mando de una de las cuatro agrupaciones navales permanentes de la OTAN desde el pasado mes de enero y hasta mediados de julio. "Ustedes contribuyen en estos momentos difíciles a esa labor de disuasión y de tranquilidad", ha destacado ante los 227 efectivos del buque.

Y lo ha hecho desde el que es uno de los últimos miembros de la Alianza Atlántica, el cual ingresó hace un año. Un país, además, clave para la seguridad aliada, pues comparte más de 1.300 kilómetros de frontera con Rusia, algo que a su población le genera una "gran preocupación" y, por ese motivo, consideran que "esta misión es muy importante porque contribuye a esa labor de disuasión, les da seguridad y tranquilidad", ha apuntado.

Con esta visita, Defensa vuelve a escenificar el compromiso de España con la seguridad y la defensa colectiva en un momento en el que nuestro país tiene desplegados unos 1.900 efectivos y medios de todo tipo en las diferentes fuerzas permanentes de la Alianza (terrestres, navales y aéreas), principalmente en el flanco Este como respuesta al desafío de Rusia. Por ello, la ministra ha vuelto a dejar claro ese compromiso de España.

"Puede complicarse"

Eso sí, el Jefe de Estado Mayor de la Defensa (Jemad), almirante general Teodoro Esteban López Calderón, ha querido recordar también que se trata de "una misión real" que "en cualquier momento puede complicarse más allá de lo que todos desearíamos". Él también ha querido destacar que "vivimos tiempos complejos donde la disuasión se ha convertido en la razón de ser de las Fuerzas Armadas".

Robles ha llegado a mediodía al aeropuerto de la capital finlandesa, donde le esperaba el embajador de España en Finlandia, Fernando Fernández-Arias. Desde allí se han trasladado al puerto en el que se encontraba la fragata española, donde han sido recibidos con honores por, entre otros, el comandante de la agrupación naval permanente nº1 (SNMG-1), contralmirante Joaquín Ruiz Escagedo, y el comandante de la "Almirante Juan de Borbón", capitán de fragata Raúl Alba Fernández.

A bordo de la fragata, Robles se ha reunido durante una media hora con el ministro de Defensafinlandés, Antti Häkkänen, a quien no solo ha felicitado por la reciente adhesión de su país a la OTAN, sino que también le ha reiterado el compromiso de España con la seguridad en una tensa zona como es el área del Báltico. Él, por su parte, le ha transmitido su agradecimiento por la presencia de esta agrupación al mando de un buque español.

Vigilancia de buques rusos

Tras esta reunión, los dos comandantes españoles (el de la SNMG-1 y el de la fragata española) han explicado el trabajo que lleva a cabo esta agrupación naval, en la que también hay buques de Italia, Alemania, Noruega y Francia. De hecho, una de las misiones principales de estas fuerzas navales es la vigilancia de los buques rusos, algo que ya se venía haciendo, pero ahora como consecuencia de la guerra se ha reforzado ese control, tanto de los buques de guerra como de los mercantes que les dan apoyo, para "evitar sorpresas" y que no se produzcan sabotajes como el del Nord Stream.

"La disuasión es muy importante. Es mandar el mensaje de que la OTAN entera está disponible", apuntan desde el mando de la agrupación. Por este motivo, dos de estos cuatro grupos navales de la Alianza han reducido su teatro de operaciones al Mar del Norte y al Báltico, para ejercer como una fuerza de disuasión y "que los rusos nos vean aquí todos los días".

Y como es habitual en estas visitas, la ministra ha aprovechado para charlar de una forma más informal con algunos de los 227 efectivos que componen la dotación del buque español. A todos ellos les ha transmitido "su agradecimiento y orgullo" por la labor que realizan.

Medio año al mando

El pasado 6 de enero, la "Almirante Juan de Borbón" partió de Ferrol para unirse a la SNMG-1, de la que asumió el mando seis días después en la base naval de Wilhemshaven (Alemania). Junto a la fragata española, en la agrupación también están integrados el buque de aprovisionamiento alemán "Rhoen", la fragata italiana "Luigi Rizzo", la noruega "Otto Sverdrup" y la francesa "Normandie". Hasta el pasado mes de marzo, también estaba desplegado en ella el Buque de Aprovisionamiento de Combate (BAC) "Cantabria".

El Estado Mayor de esta agrupación es multinacional y está formado por 22 efectivos, de los cuales 17 son españoles y los cinco restantes proceden de Países Bajos, Alemania, Portugal, Reino Unido y Polonia. La mitad del personal español de este Estado Mayor pertenece al Cuartel General Marítimo de Alta Disponibilidad (CGMAD), que tiene como una de sus misiones ser "generador de estados mayores desplegables". El resto de sus integrantes procede de diversas unidades de la Fuerza y del Apoyo a la Fuerza de la Armada.

La "Almirante Juan de Borbón" cuenta a bordo con un helicóptero SH60B "Toro", con un Equipo Operativo de Seguridad de la Fuerza de Infantería de Marina y con un oficial de sanidad. En total, esos 227 efectivos ya citados, de los que 32 son mujeres.

Objetivo: presencia y disuasión

El objetivo de estas agrupaciones navales (dos de escoltas y dos de medidas contraminas) es la de proporcionar una presencia marítima permanente a la OTAN en el Mediterráneo, Atlántico, Mar del Norte y Báltico. Además, constituyen el elemento básico del componente naval de la Fuerza Conjunta de Muy Alta Disponibilidad Marítima (VJTF-M) de la Alianza, siendo las primeras fuerzas aliadas que se activan, incluso antes de que se declare una crisis.

Así, con su presencia, ejercen como fuerza de disuasión y exhiben unidad ante la amenaza que supone Vladimir Putin. De ahí que durante su despliegue se lleven a cabo numerosos ejercicios con otras marinas aliadas para también mejorar la interoperabilidad y cooperación entre unidades de la OTAN. Entre ellos, el "Steadfast Defender 24", el mayor ejercicio de la Alianza en décadas y que aún continúa en tierra. La fase marítima comenzó a finales de enero y finalizó a mediados de marzo, siendo la fragata española la única unidad activa durante todo el ejercicio, que se desarrolló en aguas de Reino Unido y norte de Noruega, más allá del Círculo Polar Ártico.

Y a partir de ahora, una vez abandone Helsinki, la agrupación pondrá rumbo a Stavanger (Noruega), completando durante el trayecto una serie de ejercicios para mantener su nivel de alistamiento y de adiestramiento, enfocados principalmente a la preparación del ejercicio de guerra antisubmarina "Dynamic Mongoose 24", que tendrá lugar entre los días 29 de abril y 11 de mayo en aguas de Noruega, y en el que el contralmirante español asumirá el mando de todos los buques participantes. Una vez finalizado el ejercicio, la agrupación entrará en el puerto de Rejkyavik (Islandia).

Mientras, en junio está prevista la participación de la agrupación en el ejercicio "Baltops", en aguas del Mar Báltico. Unas maniobras en las que está prevista la participación del grupo de combate español "Dédalo", con el portaaeronaves "Juan Carlos I" al frente.

1.900 efectivos frente a Rusia

Pero el de la "Almirante Juan de Borbón" y sus 227 efectivos es solo uno de los despliegues españoles en las diferentes fuerzas permanentes de la OTAN, las cuales ha ido reforzando desde la invasión de Ucrania por parte de Rusia. En la actualidad, España tiene desplegados alrededor de 1.900 militares en diversas misiones aliadas de disuasión, a las que también aporta medios de todo tipo, como cazas, buques, carros de combate o baterías de misiles.

El contingente más numeroso se encuentra en Lest (Eslovaquia), donde 700 efectivos (con 250 vehículos ligeros) ya se preparan para liderar a partir de julio el batallón terrestre de la OTAN en este país, el cual está llamado a aumentar su tamaño y convertirse en brigada. Otros 650 efectivos, con carros de combate "Leopardo", artillería pesada o una batería de misiles están integrados en el batallón de la Alianza en Adazi (Letonia), en el marco de la Presencia Avanzada Reforzada (eFP).

También en el área del Báltico, en la localidad de Siauliai (Lituania), 150 militares y ocho cazas protegen el espacio aliado como parte de la Policía Aérea del Báltico (BAP). La misma misión están realizando en Rumanía 57 efectivos del Ejército del Aire y sus cinco aviones de combate Eurofighter. Un país este en el que también se encuentra desplegado un radar de alerta temprana español controlado por alrededor de 40 uniformados, los cuales forman el Destacamento "Tigru".

Por último, el buque cazaminas "Segura" lleva desde el pasado mes de marzo integrado en la agrupación naval de medicas contraminas nº2 (SNMCMG-2) en el Mediterráneo, una misión que comparte con buques de Italia, Turquía y Grecia.