El submarino S-81 pone a prueba sus tubos lanzatorpedos

Hace dos meses que la Armada española recibió la primera de las unidades del submarino S-80, el S-81 "Isaac Peral". Una entrega que no supuso su entrada en servicio, sino que comenzaba otra importante etapa de pruebas para convertirse realmente en un buque de guerra. Una fase que se prolongará algo más de un año, tal y como explicó en su día a LA RAZÓN su comandante, capitán de corbeta Manuel Corral Iranzo. Y entre esas pruebas está una que han desarrollado estos días: los lanzamientos desde sus tubos lanzatorpedos, aunque en esta ocasión, lo que ha disparado han sido maquetas.

Así lo ha confirmado la propia Armada a través de una publicación en su perfil de X, donde ha mostrado un vídeo de este momento. "El submarino Isaac Peral continúa con su adiestramiento y pruebas de mar", han escrito, añadiendo que, en esta ocasión, esos test consisten en "lanzamientos de maquetas desde los tubos lanzatorpedos". E incluyen la frase "Per historiam ad gloriam", (¡A través de la historia hasta la gloria!).

De esta forma, la Armada continúa con esas intensas pruebas tras recibir el que es considerado uno de los submarinos más modernos del mundo y con un importante poder ofensivo. De hecho, el día de su entrega en Cartagena, el Jefe de Estado Mayor de la Armada (AJEMA), almirante general Antonio Piñeiro Sánchez, destacó ese poder: "No existe un arma que por su discreción y poder ofensivo proporcione mayor capacidad de disuasión que un submarino", dijo, añadiendo que, "además de un arma, es una herramienta de diplomacia e influencia esencial para el poder político".

En concreto, el sistema de armas del S-80 incluye seis tubos lanzatorpedos y cuenta con capacidad para embarcar hasta 18 armas (misiles, torpedos y minas). Por el momento integrará los misiles Harpoon con capacidad de ataque a tierra o los DM2A4 de guerra antisubmarina, además de minas inteligentes Minea. Y aunque está preparado para alojar los misiles de crucero Tomahawk, aún no disponen de esa capacidad.

Dentro de esta nueva fase de pruebas hasta su entrada en servicio también está el lanzamiento de munición real, además de otra serie de hitos logísticos, administrativos y operativos. Todo concluirá con un crucero de resistencia y la calificación operativa del buque», tal y como explicó el comandante del "Isaac Peral".