Andalucía

Díaz ya ejerce como líder del PSOE sin Fernández

Críticos y afines dudan de la idoneidad de su sobrexposición: «Debería adoptar un perfil más bajo para calmar los ánimos»

Susana Díaz, junto al secretario general de la Internacional Socialista, Luis Ayala, ayer en Málaga
Susana Díaz, junto al secretario general de la Internacional Socialista, Luis Ayala, ayer en Málagalarazon

Críticos y afines dudan de la idoneidad de su sobrexposición: «Debería adoptar un perfil más bajo para calmar los ánimos»

Dos actos en menos de 24 horas que trasladan la imagen de que Susana Díaz es la cabeza visible del PSOE. Aunque el liderazgo le corresponde de manera interina a la gestora conformada tras la destitución de Pedro Sánchez, la gestión anodina de la dirección provisional coloca el foco de atención en la presidenta andaluza, aunque sólo sea porque el brazo ejecutor de cualquier decisión es su delegado en este órgano en Madrid, el portavoz andaluz Mario Jiménez. Si el martes Díaz confirmaba la fecha del Comité Federal –para el 14 de enero– antes de que en Ferraz se reunieran siquiera para convocar la reunión, ayer la presidenta andaluza ejerció de máxima líder del partido –en ausencia del presidente de la gestora, Javier Fernández– en la clausura del Comité Mediterráneo de la Internacional Socialista que se ha celebrado durante dos días en Málaga.

En su intervención, Díaz sacó pecho por ser Andalucía «la región con la experiencia más larga de un gobierno socialista en todo el Mediterráneo», algo que calificó como «una oportunidad» para «demostrar que somos diferentes y para demostrar nuestro compromiso por la paz, la solidaridad y la igualdad». La presidenta armó un discurso en clave internacional que –unido a su último viaje a Bruselas, donde mantuvo diversas reuniones bilaterales con altos representantes europeos– le permiten mostrar un perfil de líder más allá del ámbito meramente nacional.

El cierre del Comité Mediterráneo y el acto junto al ex presidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero sobre Dependencia en Jaén ponen el broche a dos días de sobrexposición mediática de la presidenta andaluza. Aunque en Jaén Díaz se limitó a defender la autonomía del proyecto socialista respecto al PP y Podemos, el ex presidente sí se ocupó de dar alas a una eventual futura candidatura de la andaluza. En el mismo sentido se volvió a pronunciar ayer durante su intervención en un acto en Zaragoza dónde reiteró que ya había dado un apoyo «muy claro» a la «tarea» de Susana Díaz y defendió que es «constatable» que la dirigente ha unido «en una piña» al PSOE en su territorio. «Esto es lo que sabemos, a partir de ahí la unidad del PSOE es una unidad en la libertad», dijo. Sin embargo, las excesivas atenciones de Zapatero con Díaz no acaban de convencer a varios sectores del partido, críticos y oficialistas incluidos. El «díscolo» Odón Elorza se pronunció en su cuenta de Twitter cuestionando si «es ético aprovechar un legítimo homenaje a la ley de dependencia para desacreditar a otros socialistas y hacer campaña personal». Pero tampoco los afines a Díaz valoran positivamente su excesiva presencia en los medios. «Tiene que exponerse menos», recomiendan. Creen que debe adoptar un «perfil más bajo» para apaciguar la contestación interna que despierta su figura en ciertos sectores de la militancia y frenar el crecimiento de la corriente «antisusanista» que la considera la culpable del descabalgamiento del ex secretario general. En la guerra del relato, los ahora oficialistas saben que han jugado mal sus cartas y no han sabido vender que la verdadera razón para forzar la salida de Sánchez era su actitud decidida a promover un Gobierno con los votos de los partidos soberanistas, que habría multiplicado en el futuro sus aspiraciones independentistas. Desde estos sectores se le aconseja un periodo de «cuarentena» para intentar limar las asperezas que despierta de cara al próximo Congreso en el que dan por seguras su candidatura y la necesidad de que sea la única que se presente para esquivar unas primarias que ahondarían más en la brecha. Aunque, tal como adelantó ayer este diario, los principales dirigentes territoriales del PSOE se están moviendo en privado para promover esta candidatura de unidad, en público evitan pronunciarse en favor de ninguna opción. Ayer el presidente de la Comunidad Valenciana, Ximo Puig, evitó pronunciarse sobre el aval expreso de Zapatero a Díaz, señalando que «las candidaturas sólo se oficializan cuando se presentan».

Zapatero: «Se recuperará la mayoría social»

El expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero apuntó ayer que se dan las condiciones para que el PSOE vuelva a tener una posición «mayoritaria» y recupere una «mayoría social, política y electoral» en el país, una vez que se celebre el Congreso Federal del partido. «Ayer lo dije y hoy lo reitero, a mí me gustan los congresos, creo que son momentos en los que el partido debate y marca rumbos», explicó para añadir que su «intuición política» le dice que el próximo Congreso Federal va a llevar al PSOE «a recuperar esa mayoría». Sobre si Susana Díaz será la próxima secretaria general, pidió respetar los tiempos y las candidaturas, señalando que serán los militantes los que hablarán.