Gobierno de España

Dirigentes del PP llevarán al Congreso la limitación de cargos

Concejales y dirigentes populares quieren llevar al Congreso de febrero los límites para impedir la acumulación de cargos. Presentarán enmiendas para su discusión mientras todos los focos estarán puestos en el futuro de Cospedal

La ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, ha mostrado su intención de seguir como número dos del PP
La ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, ha mostrado su intención de seguir como número dos del PPlarazon

Concejales y dirigentes populares quieren llevar al Congreso de febrero los límites para impedir la acumulación de cargos. Presentarán enmiendas para su discusión mientras todos los focos estarán puestos en el futuro de Cospedal

En el Congreso Nacional del PP de febrero se discutirá la acumulación de cargos institucionales por parte de dirigentes del partido. La dirección nacional no lo ha incluido en la ponencia de estatutos, pero hay peticiones en ese sentido y prevén que habrá alguna enmienda que obligue a abrir esta discusión. Fuentes populares confirmaron a este diario que «habrá enmiendas seguro en ese sentido, porque hay dirigentes y militantes que lo han planteado y seguro que se debatirá». Que salga o no adelante dependerá de la mayoría, puntualizan.

El cónclave que el PP celebrará a mediados de febrero estará marcado por la situación política y en materia de propuestas, los populares no tienen mucho margen para innovar sobre la agenda a la que están obligados a ajustarse por su situación de minoría. Plantearán debates, con un marcado guiño social, pero uno de los principales focos de este Congreso estará colocado sobre el futuro de la Secretaría General del partido, después de que María Dolores de Cospedal entrara en el Gobierno como ministra de Defensa. La decisión la tomará el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y, de momento, no ha hecho ningún gesto pese a que Cospedal sí ha dado a entender que quiere seguir manteniendo el control de la Secretaría General. A pesar de las reticencias que esto genera dentro de su propia organización política, donde admiten que debería desvincularse la jefatura del Ministerio de Defensa «de un cargo absolutamente partidista y que exige dedicación completa».

La demanda de que se revisen las incompatibilidades viene de atrás, y la sostienen sobre todo cuadros intermedios, diputados provinciales, concejales. Lo que exigen es que sólo pueda acumularse un cargo en el partido y uno institucional. Los diputados están ya incompatibilizados con el cargo de presidente y secretario general en el ámbito provincial, regional y nacional, pero es una cláusula estatutaria que no se ha cumplido. Por ejemplo, con los Estatutos actuales Cospedal no podría ser secretaria general, ministra y diputada, porque además es presidenta regional del PP de Castilla-La Mancha. Ésta es una de las excepciones que se han hecho.

En el Congreso se hará sentir la demanda de que sean más estrictos en la incompatibilidad de cargos en general, sobre todo porque en el ámbito provincial ha habido mucha gente que ha ocupado demasiadas responsabilidades a la vez y eso ha generado enfado interno. Pero lo que no está claro es sí se concretará en alguna medida en los Estatutos o Génova conseguirá poner sordina al debate. De momento, desde estos cargos intermedios que piden que se revise la situación lo que se demanda de partida es que se cumplan los actuales Estatutos, que sí permiten compatibilizar la condición de senador con un cargo de presidente o secretario general y otros en corporaciones locales o provinciales o en Parlamento y gobiernos autonómicos, pero no con estos dos últimos simultáneamente. Mientras que establecen que la condición de diputado al Congreso o al Parlamento europeo es incompatible con el desempeño de cargos de presidente o secretario general insular, provincial o autonómico del partido y con los de alcalde, presidente de Diputación provincial, Consell o Cabildo insular.

Además de la incompatibilidad de cargos, es posible que fuera de la agenda oficial del Congreso pueda acabar entrando también el debate sobre la limitación de mandatos. Está abierto internamente y, de hecho, ya ha formado parte del orden del día de otras reuniones del partido en clave nacional como la Conferencia Política que celebraron en Madrid en julio de 2015. La propuesta era que tanto el presidente del Ejecutivo como los titulares autonómicos estuviesen un máximo de ocho años en el cargo, aunque se quedó en el aire a falta de la aprobación definitiva de Rajoy y de la cúpula popular. Pero ya en convenciones anteriores, como la que tuvo lugar en Málaga en 2011, también figuraba en la agenda debatir sobre propuestas como ésta de la limitación de mandatos. No obstante, con Rajoy en su segunda Legislatura, la dirección nacional ha optado por esquivar este asunto aún a costa de desvincular la normativa que debe regular el funcionamiento interno del partido durante los próximos cuatro años de premisas que condicionaron el acuerdo con Ciudadanos, como es el caso de limitar los mandatos a ocho años. Recientemente, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, que había asumido previamente este compromiso, lo rectifico para optar a un tercer mandato que renovó por mayoría absoluta. Génova es firmemente contraria a imponer esta cláusula como obligatoria en sus Estatutos, lo que supondría marcar oficialmente el final de la carrera política de Rajoy en esta Legislatura, de llegar a agotarse. Rajoy nunca se ha pronunciado a favor, e incluso desde su entorno se recuerda que hay líderes europeos, como la canciller alemana, Angela Merkel, que han anunciado que optan a un cuarto mandato.

Génova sí puede haber conseguido dejar fuera del Congreso la polémica sobre las primarias con su apuesta por introducir un sistema de doble vuelta, que da más voz a los afiliados, aunque la decisión última siga siendo de los compromisarios. En principio, dan por hecho que Madrid y Valencia se conformarán con esta modificación estatutaria.