El Consell valenciano lamenta ahora la censura al artista Matisyahu

El secretario autonómico de Cultura y Deporte, Albert Girona, y la directora general de Cultura y Patrimonio, Carmen Amoraga, defendieron ayer la libertad de expresión y manifestaron su descontento por la supresión del concierto del artista hebreo Matisyahu.

La dirección del festival decidió el pasado domingo anularlo tras la campaña de la organización Boicot, Desinversions y Sancios, en la que acusaron al artista de haber participado en festivales «prosionistas», así como de ser amante de Israel y de haber afirmado que «Palestina no existe».

La organización del Rototom solicitó a Matisyahu que se pronunciase abiertamente sobre sus ideas políticas y, ante el silencio del hebreo, anularon su concierto, programado para el próximo sábado. La directora general de Cultura aseveró que el compromiso de un artista es «personal» y nada tienen que ver sus ideas políticas. Por su parte, Girona opinó que «no se debería de haber forzado al artista a hacer declaraciones a favor del Estado palestino» e interpretó que se le ha hecho un boicot similar al que han sufrido en España los artistas catalanes.

Mientras, el Gobierno reprobó ayer la decisión de los organizadores del festival porque cuestiona el principio de no discriminación y lo considera «una forma de actuar que violenta la conciencia».

El afectado reconoció en Facebook que había sufrido una «presión espantosa y ofensiva» para que revelase sus creencias políticas. Los miembros de la federación pusieron de manifiesto que la organización no debería haber cedido a la presión. La dirección del festival ha convocado una rueda de prensa para hoy con el fin de tratar esta polémica.