El desafío independentista

El independentismo no quiere elecciones, pero sí la DUI

La Junta de Portavoces del Parlament activa hoy los trámites para dar respuesta al 155

El independentismo no quiere elecciones, pero sí la DUI
El independentismo no quiere elecciones, pero sí la DUIlarazon

La Junta de Portavoces del Parlament activa hoy los trámites para dar respuesta al 155.

Se hace difícil llevar la cuenta de las fechas decisivas del independentismo, pero, sin duda, hay que contar con la semana entrante entre ellas. La Junta de Portavoces del Parlament vuelve hoy a la acción y lo hace con la intención de convocar un pleno para «actuar en consecuencia» de la aplicación del artículo 155 de la Constitución. Así lo reclamó el sábado Carles Puigdemont. No lo explicitó, pero todos entendieron que el presidente de la Generalitat quiere, ahora sí, una pista de aterrizaje para la declaración unilateral de independencia (DUI) que sobrevuela el mapa político catalán desde el pasado 1 de octubre. La mayoría de Junts pel Sí quiere evitar que el Tribunal Constitucional (TC) suspenda el pleno y quiere, a la vez, que la DUI se produzca antes de que el Senado ratifique las medidas del 155. La manera de satisfacer ambas cuestionan es convocar un pleno este viernes, 27 de octubre, tal y como adelantó el domingo este diario.

Los soberanistas se cuidarán de dar pistas formales sobre la DUI en la convocatoria del pleno para no abrir la puerta a una actuación del TC, pero a estas alturas ya nadie duda de que se preparan para culminar su hoja de ruta como sea. El conseller de la Presidencia y portavoz de la Generalitat, Jordi Turull, avanzó que el pleno adoptará una decisión respetuosa con «el mandato del 1 de octubre» y ahuyentó la posibilidad de unas elecciones al Parlament. Más contundente fue la secretaria general de ERC, Marta Rovira, que reclamó «acelerar» la puesta en marcha de la República catalana.

Lejos de prepararse para acatar la aplicación del 155 y el inminente cese del conjunto del Govern que conllevará la medida, los dirigentes independentistas se preparan para todo lo contrario. «La República no es sólo una opción, sino una absoluta necesidad de supervivencia», decía ayer el conseller de Exteriores, Raül Romeva, para reflejar el sentimiento que impera entre los dirigentes de JxSí.

El problema es cómo conseguir que la unidad del bloque soberanista no vuele por los aires, ya que hay dirigentes del PDeCAT que siguen siendo contrarios a la DUI y que prefieren contemporizar. En cambio, la presión de la CUP es total. Los antisistema no quieren más dilaciones y reclaman proclamar la República con toda contundencia.

De momento, el consenso que existe entre los soberanistas consiste en levantar la suspensión anunciada por Puigdemont sobre la ley de transitoriedad jurídica y fundacional de la República, lo cual abriría el paso a la declaración de independencia.

En el camino, sin embargo, los soberanistas intentarán sellar una penúltima imagen de unidad con Catalunya Sí que es Pot con algún tipo de iniciativa parlamentaria para defender las instituciones de autogobierno y en protesta por la aplicación del artículo 155.