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El Juan Sebastián de Elcano se adentra en tierra de vikingos

Hoy miércoles nos encontramos ya en Polonia, y nos gustaría reseñar que es la primera vez que el Juan Sebastián Elcano arriba en este país

El Juan Sebastián de Elcano se adentra en tierra de vikingos
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Aquí estamos una semana más. Se nos hace imposible no caer en la cuenta de que ya tan solo nos queda un mes de esta aventura, con sentimientos enfrentados. Tenemos familiares y amigos que nos esperan con ansia en casa y nuestras ganas por reencontrarnos con ellos son obvias. Enseñarles los interesantes recuerdos que hemos podido adquirir y compartir con ellos todos los exóticos recuerdos que hemos ido recopilando a lo largo del crucero de instrucción son algo que todos deseamos hacer. No obstante, parece claro que cuando llegue el momento nos abordará una gran nostalgia por desembarcar de este emblemático buque, embajador y navegante, en el que tanto mundo, cultura y personas hemos conocido y al que, quien sabe, si tendremos la oportunidad de volver.

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Una vez pasado el Canal de La Mancha en nuestro tránsito hacia Polonia, esta semana hemos estado navegando por el Mar del Norte y pasando por los canales de Skagerrak y Kattegat. Es en este tránsito en el que hemos alcanzado la latitud más Norte de este crucero de instrucción y de la mayoría de guardiamarinas hasta el día de hoy. Me imagino que el nombre de este segundo canal, Kattegat, les resultará familiar por la reciente y famosa serie de televisión “Vikingos”.

Pues bien, está siendo toda una sensación navegar por estas aguas desconocidas para nosotros. Navegando con costa en el horizonte a ambas bandas, una intensa niebla y el frío característico de estas latitudes forman auténticas estampas de esta serie. Puede uno hasta imaginarse a Ragnar Lothbrock y su flota navegando por estas aguas. Uno de los fenómenos más impactantes que hemos podido observar es que, a estas alturas del año, hay escasas 4 horas de oscuridad por estas latitudes, anocheciendo a las 21:30 y con luz de nuevo desde las 02:00. También, al estar muy próximos al canal de Kiel (el canal artificial más transitado del mundo), el tráfico marítimo es increíble. Esto, junto con lo angostas que son varias partes de estos pasos, e incluso la existencia, de resquicios de minas de la 2ª Guerra Mundial en algunas zonas fuera de las vías de paso, hace más demandante la preparación y ejecución de esta navegación, que ya de por sí es exigente.

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Por otra parte, también queríamos comentar que puede que esta semana haya sido la más ajetreada para nosotros, los guardiamarinas. Gran parte de las asignaturas militares semestrales llegan a su fin, por lo que se nos han juntado varios exámenes con el parcial de la asignatura de la ingeniería (Fundamentos de Organización de Empresas), aparte de las habituales guardias y preparación de conferencias profesionales. Esto es porque a partir de hoy, que llegamos a Polonia, también tendremos 12 días de puerto entre Polonia y Alemania y eso supone un importante parón en nuestro habitual ritmo a bordo. Por suerte para nosotros este esfuerzo, si todo sale bien, supondrá una reducción considerable de la carga lectiva. A su vez, la gran mayoría de nosotros ha finalizado, por fin, con las observaciones y problemas astronómicos, lo que nos permite disponer de un tiempo extra en nuestro apretado horario. Pensábamos que este día nunca llegaría.

Hoy miércoles nos encontramos ya en Polonia, y nos gustaría reseñar que es la primera vez que el Juan Sebastián Elcano arriba en este país. El motivo es el “SAIL Szczecin”, o lo que es lo mismo, los días del Mar de Szczecin, donde se celebrarán una gran cantidad de actividades alrededor de la concentración de numerosos veleros, y donde nuestro bergantín-goleta lucirá con orgullo la Bandera de España. Ahora por delante nos quedan 5 días donde trataremos de alternar las actividades programadas y el tiempo libre para visitar este país bañado por el Báltico.

Sin más que reseñar por el momento, la semana que viene continuaremos y nos despedimos tomando ya notas de lo que le vamos a contar en la próxima entrega.

Buena mar y buena semana