El desafío independentista
El Parlament invita a los diputados a acudir a los actos independentistas
Las instituciones catalanas agitan la celebración de la Diada más soberanista de la historia de Cataluña. La Cámara catalana se pone al servicio de la entidad soberanista y traslada a todos los diputados un pase para la «Festa per la Llibertat»
Las instituciones catalanas agitan la celebración de la Diada más soberanista de la historia de Cataluña. La Cámara catalana se pone al servicio de la entidad soberanista y traslada a todos los diputados un pase para la «Festa per la Llibertat»
«Por encargo de la presidenta de Òmnium Cultural, os adjuntamos una invitación para asistir a la décimocuarta edición de la Festa per la Llibertat». Con este encabezamiento, el Parlamento de Cataluña ha trasladado a los 135 diputados autonómicos la información pertinente para sumarse a los festejos independentistas que hoy organiza Òmnium en el paseo Lluís Companys de Barcelona. La iniciativa es inédita, puesto que el Parlament únicamente informa a los diputados de los actos institucionales de la Cámara. Sin embargo, en esta ocasión, el Parlament ha querido hacer una excepción con Òmnium con motivo de la Diada y ha accedido a actuar como secretario de la entidad que organiza la «vía catalana hacia la independencia» junto a la Asamblea Nacional Catalana.
El Parlament justifica esta iniciativa con el propósito de confirmar conjuntamente la asistencia de todos los diputados interesados en acudir a los bastidores del concierto que protagonizarán esta tarde los grupos Blaumut, Gossos y Yacinne & The Oriental Groove. La invitación de Òmnium, por su parte, no puede ser más explícita: «Celebramos un año más la Diada Nacional de Cataluña, la fecha en que hace falta reivindicar más que nunca nuestro derecho a decidir como pueblo».
El trato exquisito que el Parlament y la Generalitat dispensan a las entidades volcadas con el proyecto soberanista no es nuevo. De hecho, hoy mismo se verá una muestra elocuente, ya que tanto el presidente de la Generalitat, Artur Mas, como la presidenta del Parlament, Núria de Gispert, recibirán a una comitiva de la Asamblea Nacional Catalana (ANC) como organizadores de la cadena humana independentista.
Tanto Òmnium Cultural como la ANC se han convertido en los últimos tiempos en el brazo civil de la Generalitat para agitar el movimiento soberanista en las calles. Cabe recordar que han sido estas dos entidades las que han organizado las dos últimas grandes manifestaciones soberanistas en Cataluña, la posterior a la sentencia del Tribunal Constitucional (TC) sobre el Estatut en 2010 –cuyo eslogan fue «Somos nación, nosotros decidimos»– y la del año pasado que llevó por lema «Cataluña, nuevo estado de Europa».
Su última demostración de fuerza se produjo a finales del pasado mes de junio, cuando organizaron en el Camp Nou el llamado «concierto por la libertad», que llenó el estadio del FC Barcelona de banderas «estelades».
Un trato exquisito
Òmniumha sido particularmente mimada por la Generalitat con decenas de subvenciones muy difíciles de cuantificar en la maraña de anuncios del Documento Oficial de la Generalitat de Cataluña (DOGC). La principal, sin embargo, es un convenio para la financiación de diversos proyectos y actividades de promoción de la cultura catalana y de fortalecimiento de la propia institución. Esta ayuda asciende a 965.977 euros y se distribuye en tres anualidades desde 2011 hasta el año en curso.
El exquisito trato institucional dispensado hacia Òmnium no sólo se ha traducido en ayudas millonarias, sino también en distinciones de honor. El año pasado, sin ir más lejos, el Parlamento de Cataluña concedió a la entidad soberanista su máxima condecoración, la medalla de oro de la Cámara catalana, la misma que obtuvo el entrenador Pep Guardiola, también involucrado también en el proyecto soberanista.
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