El PSOE amenaza con exigir el fin del acuerdo con la Santa Sede

El debate, como otros tantos, no es nuevo en el PSOE: revisar o no los acuerdos entre la Santa Sede y el Estado español firmados en 1976. Ha habido propuestas, documentos e incluso resoluciones políticas en conferencias, congresos y otros cónclaves..., pero nunca antes ha habido en el ánimo de la dirección federal una voluntad tan firme como ahora de llegar hasta el final del asunto. El secretario general, Alfredo Pérez Rubalcaba, lo anunció en el discurso con el que ganó el 38º Congreso, pero la iniciativa parecía heber caído de nuevo en el olvido. Y ahora está decidido a redactar una propuesta formal de la Ejecutiva Federal que llegue al Congreso. El motivo: la decisión del Gobierno de modificar la ley de interrupción voluntaria del embarazo para acabar con los plazos que estableció el Ejecutivo de Zapatero.

Lo anunció ayer la vicesecretaria general, Elena Valenciano, en declaraciones a los periodistas , al entender que «los obispos y el PP se han vuelto a poner de acuerdo para cercenar la libertad de las mujeres», algo que, según sus palabras, no supone novedad alguna pues «en esto siempre han ido de la mano».

Valenciano re refirió tanto a las declaraciones del presidente de la Conferencia Episcopal, Antonio María Rouco Varela, y del ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, para subrayar la coincidencia. Y dijo que si el primero por la mañana reclamó una «reforma urgente» de la ley del aborto y del matrimonio homosexual, el segundo, por la tarde, anunció que la actual ley de plazos se sustituirá por un «sistema de indicaciones» en el que se prohibirá el aborto eugenésico por discapacidad del feto y donde el peligro sobre la salud física o psíquica de la mujer deberá acreditarse.

«Si el Gobierno del PP va a ir de la mano con los obispos para modificar la ley del aborto y limitar la libertad de las mujeres, ya les anuncio que el PSOE exigirá que se denuncien los acuerdos con la Santa Sede», afirmó rotunda la número dos del PSOE, que advirtió que su partido no consentirá que «a estas alturas, los obispos sigan imponiendo su moral al conjunto de la ciudadanía y mucho menos, que limiten de nuevo la libertad de las mujeres».

La respuesta a Valenciano se la dio el portavoz del PP en el Congreso, Alfonso Alonso, quien afirmó que las leyes las elabora el Parlamento y no los obispos, y que la reforma de la del aborto que prepara el Gobierno quizá «no guste mucho» a los prelados españoles pero es un compromiso electoral del PP para adaptarla a la doctrina dictada sobre la materia por el Tribunal Constitucional (TC) de la que, a su juicio, se había «alejado» la anterior reforma. Respecto a la advertencia del PSOE de exigir el final de los acuerdos con la Santa Sede, Alonso rcordó que los socialistas siempre piden modificaciones del Concordato cuando están en la oposición, pero se olvidan de ello cuando ocupan el Ejecutivo. Pues en esto no le falta razón.