El Rey se verá con Puigdemont por primera vez y tras el plante a Forcadell

El encuentro tendrá lugar este domingo en Barcelona por el Congreso Mundial de Móviles

Este domingo quedará registrado en los anales de la Monarquía española. Será el primer encuentro entre el Jefe del Estado y el líder de la Generalitat en un momento de tensas relaciones. Don Felipe acudirá, como es habitual, a la cena de bienvenida para los asistentes del Congreso Mundial de Móviles en Barcelona, y coincidirá con el recién nombrado líder de la Generalitat, Carles Puigdemont. Será el primer contacto entre ambos, un mes después de que Puigdemont, en la toma de posesión de su cargo, no jurara fidelidad ni a la Constitución ni al Rey; sólo al Parlamento catalán.

La actitud del Jefe del Estado tampoco ha sido pasiva con un Gobierno que se ha ensañado en hacer un desplante tras otro a la Corona. Tras el cese de Artur Mas como líder de la Generalitat, se limitó a notificarlo en el BOE, pero no agradeció los servicios prestados, como es habitual. Por otro lado, tampoco recibió a la presidenta de la Cámara catalana, Carme Forcadell, el pasado 11 de enero, para que le comunicase la investidura del nuevo presidente de Cataluña. También en esta ocasión el procedimiento común es que tras el nombramiento de un nuevo presidente autonómico, el representante del parlamento en cuestión se entreviste en La Zarzuela con el Jefe del Estado, pero Felipe VI prefirió ser informado mediante correo electrónico. A la inminente cena en Barcelona también acudirá Forcadell, informa Efe, así como la alcaldesa de la Ciudad Condal, Ada Colau. La edil del consistorio tampoco ha escatimado en gestos hacia la Corona, como retirar en julio del año pasado el busto del Rey emérito, al considerar que la Monarquía estaba «sobrerrepresentada», al no ser ya Don Juan Carlos Rey de España. El de Barcelona no es el único consistorio que ha invertido su tiempo en pensar cómo desprestigiar a la Institución, ya que los municipios de Breda y de Arenys de Munt han declarado a Don Felipe persona «non grata». ¿El motivo? Ser el máximo representante de un Estado que impide «el ejercicio libre a decidir de Cataluña».

En este escenario, el Monarca pronunciará un discurso ante todos los asistentes, en su decimocuarta visita a Cataluña desde su proclamación como Rey en junio de 2014.

La última que estuvo fue el pasado 13 de octubre, con motivo de la apertura del XVI Foro de Iberoamérica. En su anterior visita, el día 23 de julio, debido al acto de entrega de despachos a 35 nuevos jueces de la 65ª promoción de la Escuela Judicial, el Jefe del Estado pronunció un discurso, en el que incidió en que la Carta Magna ha dado «una de las etapas más largas de estabilidad y progreso» a nuestro país, así como en la necesidad de que todas las instituciones del Estado «respeten la Ley». Precisamente, la Carta Magna establece que el Monarca debe ser el «símbolo de unidad y permanencia» de nuestro país, y como tal, una de las mayores preocupaciones de Don Felipe es el órdago secesionista catalán. La última vez que se refirió a esta cuestión fue en su mensaje de Navidad: instó a no olvidar las consecuencias de «la ruptura de la ley», o «la imposición un proyecto de unos sobre la voluntad de los demás españoles».