Feijóo, el candidato mejor valorado

La izquierda trató de agarrarse a un supuesto descenso de la popularidad de Alberto Núñez Feijóo tras poco más de un año como líder del PP para intentar ver un flanco débil por el que atacar en la antesala del ciclo electoral. Sin embargo, las urnas han desmentido esa impresión porque el PP ha arrasado en las elecciones municipales y autonómicas con una implicación muy notoria de Feijóo y los estudios de opinión también lo rebaten. Según la encuesta de NC Report realizada para LA RAZÓN, el candidato de los populares es el líder mejor valorado, con un 4,5 de nota. Por detrás, quedan Pedro Sánchez, con un 4,2; Yolanda Díaz, con un 4,1; y, Santiago Abascal, con un 3,3.

La encuesta, realizada entre el 12 y el 17 de junio con 1.000 entrevistas, deja entrever, además, cómo Feijóo también puede crecer a costa del electorado del PSOE. Y es que los votantes socialistas le puntúan con un 4,2, casi en la media y consigue acercarse al aprobado. Los propios electores del PP le dan un 7, mientras que los de Vox un aprobado (5). La nota que dan los votantes socialistas a Feijóo es significativa ya que permite a los populares continuar tratando de arañar votos en el electorado descontento de la izquierda(principalmente, por los pactos con Bildu) para seguir ampliando la base electoral y la distancia con Sánchez: en la misma encuesta, queda recogido cómo cerca de 800.000 votantes optarían ahora por el PP tras elegir la papeleta del PSOE en las generales de 2019. De hecho, es el PP de Feijóo la principal fuga de votos de los socialistas (más de un 11%). Por edad, la valoración de Feijóo es bastante homogénea ya que oscila entre el 4,2 de los más jóvenes y el 5 de los más mayores.

En cambio, Sánchez, que obtiene un nota global de 4,2, tiene un enorme problema de valoración para tratar de arrastrar votantes del PP. Los electores populares tan solo le dan un 1,9, algo esperable teniendo en cuenta que una de las cosas que más han beneficiado al PP para conseguir el incremento de votos en las municipales (casi dos millones más que en 2019) es la movilización de la derecha por el rechazo que genera el actual presidente del Gobierno. Los electores de Vox puntúan parecido a Sánchez, con un 1,3; mientras que en el propio PSOE se queda en un 6,3 y en Sumar, en un 5,8. Por edades, se mantiene entre un 4,1 y un 4,3.

Yolanda Díaz pisa los talones a Sánchez en cuanto a valoración y se queda con una nota global de 4,1. Lo cierto es que la candidata de Sumar ha tratado de proyectarse como una figura mucho más centrada y moderada que sus antecesores en el espacio de Podemos y eso, según alertan los expertos, pueda asimilarla al PSOE, lo que puede acabar siendo contraproducente para sus perspectivas electorales. En este sentido, prácticamente con la misma valoración que Sánchez, ha ido perdiendo fuelle y ya parecen quedar muy lejanas las encuestas que pronosticaban un crecimiento sustancial de Sumar: el propio estudio demoscópico de NC Report lo refleja, ya que obtendría menos escaños que en 2019 (pasaría de 38 a 30-32).

Santiago Abascal es el líder peor valorado y se quedaría en un 3,3. El candidato de Vox nunca ha tenido grandes índices de popularidad, pero sí que está siempre muy bien valorado entre los suyos y los votantes de su partido le dan un 6,9. Los electores del PP le dan un 4,3 (es decir, no consigue el aprobado como sí lo hace Feijóo con los votantes de Vox), un dato importante de cara a los pactos postelectorales porque, previsiblemente, los populares no consigan la mayoría absoluta y tengan que acordar con Vox. A partir de ahí, está por ver si un hipotético pacto incluye la creación de un gobierno de coalición, lo que incluiría al propio Abascal como posible vicepresidente. Por ahora, ese escenario parece lejano visto la constitución de los ayuntamientos (tan solo cinco capitales de las 32 que gobierna el PP son una coalición con los de Abascal) y los gobiernos autonómicos, donde el PP ha optado por marcar distancias con Vox.

La izquierda le da a Abascal entre un 2 (PSOE) y un 1,3 (Podemos) de valoración. No obstante, sí parece que Vox ha entrado ya en una meseta y su capacidad de crecimiento ha tocado techo: ninguna encuesta augura que pueda superar los registros de 2019 (52 escaños), aunque tampoco se vaticina, de momento, un hundimiento, como sí ha ocurrido ya con Ciudadanos y puede pasar con el espacio a la izquierda del PSOE, ahora liderado por Sumar.

En cuanto a conocimiento, ninguno de los cuatro principales candidatos tienen problema: todos están por encima del 94%. Sánchez es el más conocido (como es habitual en un presidente del Gobierno), con un 99,1%, mientras que Feijóo está prácticamente a la misma altura que el máximo responsable de la Moncloa (98,7%). Mientras tanto, Díaz, que ha ejercido como vicepresidenta tercera del Ejecutivo y ha tenido una enorme visibilidad a lo largo de los dos últimos años, es conocida por el 94,3%, algo menos que el propio Abascal, que llega al 96,5%.