Feijóo pide al PSOE otra reunión para "buscar un encaje del problema territorial de Cataluña" sin amnistía y sin referéndum

Tras escuchar las exigencias de Carles Puigdemont de amnistía y referéndum, Alberto Núñez Feijóo decidió ahorrarse la reunión con Junts y este miércoles ha pedido al PSOE que "recapacite" y atienda su propuesta de pactos constitucionales. Además, ha propuesto una nueva reunión con los socialistas antes del debate de investidura del próximo 26 y 27 de septiembre. Ya en el primer encuentro, el líder del PP ofreció una legislatura de dos años para afrontar seis pactos de Estado, pero Pedro Sánchez se ha negado a aceptarlo y prefiere optar por los independentistas como socios.

Sobre Cataluña, Feijóo ha dicho que sabe que deben "dar una propuesta y buscar un encaje del problema territorial", pero ha defendido que debe ser a través de un pacto de estado con el PSOE, de acuerdo con la ley y en el marco constitucional. En todo caso, ha señalado que no será ninguna propuesta que privilegie a Cataluña: "Como máximos defensores de la igualdad entre todos los españoles, es obvio que las propuestas que impliquen un trato jurídico o económico desigual entre españoles no podrán contar con el respaldo del Partido Popular". Fuentes del PP señalan que es "es evidente" que es necesario un Pacto Territorial que "mejore el funcionamiento de las Comunidades Autónomas" para que los "planteamientos defendidos por el independentismo no sigan condicionando el debate político, como ha ocurrido en los últimos años".

Tras una reunión este miércoles en Santa Cruz de Tenerife con el presidente de Canarias Fernando Clavijo, Feijóo ha vuelto a pedir al PSOE que redirija su estrategia y no acepte las exigencias de Junts. “La mayoría ha votado el abrazo entre españoles, los consensos y la altura de miras”, ha señalado Feijóo, aludiendo a que el 75% de los españoles ha votado a PP y PSOE, un porcentaje muy superior a 2019 (48%), algo que los populares interpretan como un llamamiento de los ciudadanos a que haya pactos de Estado y los dos principales partidos se pongan de acuerdo.

En todo caso, Feijóo ha continuado en su línea de reflejar el contraste entre los caminos de PP y PSOE: “Prefiero no ser presidente del Gobierno a serlo sometido a un chantaje”, ha señalado, en relación a que no va a aceptar las exigencias de Junts, mientras los socialistas, sí. En este sentido, cabe precisar que Junts se dirige tanto al PSOE como al PP: está dispuesto a investir a Feijóo o Sánchez si alguno de los dos satisface sus demandas (a diferencia de ERC, que solo investiría a Sánchez). Por lo tanto, los populares tienen la autoridad para defender que le han dicho que "no" al PSOE y eso es lo que quieren resaltar.

"Un presidente del Gobierno no puede aceptar una España donde el principio de igualdad se quiebre y la Ley no se cumpla”, ha añadido. “No se puede aceptar la quiebra del estado de derecho, ni un chantaje de nadie por muy importante que sea en un momento concreto del parlamento”, ha afirmado. Dicho esto, ha destacado el hecho de que Vox, la tercera fuerza, no se oponga a un "gran acuerdo" de PP y PSOE para "sacar España adelante". "Prefiero el sí de 11 millones de ciudadanos al sí de cuatro diputados", ha resaltado.

Asimismo, el líder popular recuerda que el PP queda tercera fuerza en Cataluña, por delante de ERC y Junts, por lo que reclama la “legitimidad” de su partido para defender los intereses de los catalanes frente a las exigencias “de la cuarta y la quinta fuerza política” de la Comunidad Autónoma.

Al ser preguntado expresamente si, en caso de que fracase su investidura, el PP estaría dispuesto a facilitar un Gobierno del PSOE para no contar con el concurso de los independentistas tras las exigencias de Puigdemont, Feijóo ha indicado que el PSOE "no quiere acuerdos con el PP" ni "los ha querido en ningún lugar de España". "También es verdad que nunca ningún primer ministro español puede ser el que ha perdido las elecciones", ha añadido en otro momento de su comparecencia.

Por eso, ha dicho que desea que, antes de la investidura fijada para final de mes, el PP pueda "mantener otra vez algún contacto con el Partido Socialista para intentar que entre todos" le busquen "soluciones a los problemas de España".

En el encuentro que mantuvieron la semana pasada Feijóo y Sánchez, las diferencias quedaron muy manifiestas porque el líder del PSOE evitó en todo momento dar margen para un acuerdo de investidura con el líder popular. Es más, el presidente del Gobierno en funciones regresó al tono beligerante el sábado en un acto en Andalucía, cargando contra el PP, "la derecha económica y sus terminales mediáticas".

Felipe González

Feijóo ha acusado a Sánchez de "callar y otorgar" ante los ataques de Podemos al expresidente Felipe González, al que han acusado de "criminal de Estado". Feijóo ha reprochado la falta de reacción de Sánchez contra esos ataques. "El PSOE que conocíamos ha dejado paso a un partido de Sánchez controlado por Sánchez, que ayer ha tenido que aceptar algo sorprendente: que uno de su aliados, Podemos, califique al expresidente González como un criminal de Estado. Y que el PSOE se calle", ha indicado.

Núñez Feijóo ha hecho hincapié en que Podemos forma parte del Gobierno en funciones "y que ese partido señale a Felipe González como criminal de Estado es la absoluta falta de dignidad del partido de Sánchez". "No comparto las calificaciones de Podemos hacia Felipe González y las denuncio. El PP, como partido de Estado, no puede aceptar que una parte del Gobierno señale como criminal de Estado al expresidente González. Lo denuncio y lamento que el secretario general del PSOE se calle, porque el que calla, otorga", ha remachado.

El líder del PP ha indicado que si él fuera presidente, la vicepresidenta del Gobierno, Yolanda Díaz, no permanecería en el cargo ni iría a "negociar con alguien perseguido por la Justicia" -en referencia a Carles Puigdemont-, como tampoco formaría parte del ejecutivo el que "llama así" al expresidente González.