Feijóo sitúa al PP como "única garantía real de cambio" frente a partidos que ya no son de Estado

Ha pasado ya un año desde que Alberto Núñez Feijóo tomara el relevo en el PP y se convirtiera en su nuevo líder. Fue Sevilla, la tierra donde el partido ha impulsó en su día su "refundación" donde, a principios de abril de 2022 le dieron al "reinicio" y tratando así de cerrar la herida abierta mes y medio antes con una crisis "express" en la que la antigua dirección, presidida por Pablo Casado había dejado al partido implicando a la presidenta de la comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. Una disputa que estaba desangrando a la formación política tanto en apoyo electoral como en una crisis de liderazgo interna.

Alberto Núñez Feijóo fue aupado por unanimidad a la presidencia del PP, tanto por parte de la militancia como de los dirigentes regionales y también por los expresidentes de la formación. Era la única solución para reconstruir un partido de gobierno y, en este año ha logrado, en palabras de los barones populares una cosa: "Unir a todo el partido". Y es que, después de que consiguiera cerrar heridas, ha recuperado a numerosos "Sorayistas" que habían dejado la política desde que Casado había tomado el poder, ha tendido en numerosas ocasiones la mano al exlíder de los populares y se afana en unir también al electorado desde el centro.

El presidente del PP ha celebrado este aniversario en un acto en Zaragoza donde ha repartido carnés de nuevos afiliados durante el último año. En su discurso de clausura, destacó que "desde 1982 nunca fue más higiénico e importante para las instituciones del Estado y la concordia un cambio político en España". Responsabilizó al Gobierno de llevar "tanto tiempo en las nubes y en el Falcon que no ven lo que ocurre en el país; llevan demasiado tiempo hablando a sus militantes". También ha aseverado que "la única alternativa a este Gobierno es el PP, la única garantía de cambio en España, la única manera de pasar página al sanchismo", para añadir: "No somos una moda, ni un espacio, ni un movimiento; no decimos que tenemos soluciones sin haber solucionado nunca nada". Ha dicho que "el populismo es lo contrario a la igualdad y la fraternidad".

Feijóo también dijo que "asumo ante todos vosotros mi compromiso de que, dentro de un año, España estará mejor que hoy".

Como presidente de los populares mostró su orgullo de ser "el primer afiliado" de una formación que es "el gran partido de nuestro país y la única alternativa real a este Gobierno, la única garantía real de un cambio político de verdad en España y la única manera de pasar página del sanchismo", reiteró.

Asimismo, advirtió de que "hay partidos que eran de Estado y que han dejado de serlo". "Han pasado de ser un partido a un movimiento cautivo de la voluntad y de los intereses de un solo hombre", fruto de sus cambios de opinión en todo, del abandono de la defensa constitucional y de la pérdida del respeto por las instituciones y la palabra dada.

También se refirió a Vox cuando expresó que hay partidos que dicen que son como el PP, pero siempre proponen no votar al PP y luego, en los momentos importantes, "ayudan siempre a Sánchez beneficiándole de forma directa o indirecta".

Feijóo se hizo eco de la presentación de la plataforma Sumar que lidera la vicepresidenta segunda Yolanda Díaz y destacó que se define como «un espacio» porque necesita parecer nuevo, pero «son siempre los mismos». «Dicen que no son partidos, que son espacios, que necesitan parecer siempre nuevos y cambian de nombre cada cuatro años, aunque llevan décadas en la política y son siempre los mismos. Cuando yo no había decidido afiliarme al PP estos que dicen ahora que son un espacio ya militaban en el mismo partido al que ahora le cambian el nombre», reveló en referencia a Yolanda Díaz. A su juicio, «tienen que cambiar el nombre porque no tienen nada que ofrecer a la gente y la gente se da cuenta rápido de que son los de siempre y cuanto más conocidos sean menos les votan», de forma que «son el populismo de siempre, que para intentar olvidar el empobrecimiento económico y social se llaman “espacio”».

En el acto, también intervinieron el presidente regional, Jorge Azcón, y la candidata a la alcaldía de la capital, Natalia Chueca. Azcón, cuyas encuestas le auguran que podría ganar las elecciones, aunque pudiera necesitar de pactos para gobernar, advirtió de que el Gobierno de Aragón «no puede dejar perder» los fondos europeos y que, si no gana, la región podría verse ante un «pentapartito».