Las feministas del PSOE presionaron a Sánchez y Cristina Narbona desde primera hora para apartar a Paco Salazar

Ni un día sin polémica en el PSOE. Este sábado, mientras se celebraba el Comité Federal, Francisco Salazar fue apartado de sus nuevas responsabilidades en el partido y de sus viejas responsabilidades en Moncloa por un presunto comportamiento sexual inapropiado.

La versión oficial, la difundida por el PSOE, es que fue el propio Salazar quien pidió ser apartado de sus funciones en la Ejecutiva del partido. Horas más tarde, Moncloa difundió otro mensaje asegurando que solicitó ser apartado, temporalmente, del Gabinete de Sánchez.

Sin embargo, fuentes del sector feminista del PSOE aseguran a LA RAZÓN que se inició una campaña de presión “desde primera hora de la mañana de este sábado” para evitar que Salazar siguiese adelante como miembro de la Ejecutiva.

Según explican, la presión se trasladó al propio Pedro Sánchez por parte de algunas miembros de la Ejecutiva. Desde el sector feminista, ya fuera de la Ejecutiva, también se ha pedido a la presidenta del partido, Cristina Narbona, que Salazar fuera apartado.

Según esta versión, Salazar no ha solicitado ser apartado, sino que ha sido la presión recibida la que ha llevado al partido a apartarle a él.

El PSOE anunció este viernes que Salazar iba a ocupar el puesto de adjunto a la secretaría de Organización del partido. El objetivo de su nombramiento era hacer borrón y cuenta nueva tras los casos de corrupción protagonizados por los dos anteriores secretarios generales. Sin embargo, ni siquiera ha llegado a ser ratificado en el cargo en el Comité Federal que se ha celebrado sólo un día después.