El desafío independentista

Así se retractaron ante el juez los «ex consellers» y los Jordis

En sus comparecencias ante el juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena, los ex consellers de Carles Puigdemont abjuraron de la vía unilateral que guió el proceso independentista

Imagen de archivo de Forn y Puigdemont
Imagen de archivo de Forn y Puigdemontlarazon

En sus comparecencias ante el juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena, los ex consellers de Carles Puigdemont abjuraron de la vía unilateral que guió el proceso independentista y se comprometieron a acatar la Constitución.

El ex conseller de Interior Joaquim Forn defendió ante el juez del Tribunal Supremo el pasado 1 de diciembre el papel de los Mossos d´Esquadra el 1-O. Durante su comparecencia judicial, Forn recordó que cuando Carles Puigdemont le ofreció ponerse al frente de Interior, el 13 de julio de 2017 (tras la dimisión de Jordi Jané), le planteó que su voluntad era «llegar a la celebración de un referéndum pactado» y que la posibilidad de una declaración unilateral de independencia ni siquiera se planteó.

«El día que me reuní con el presidente de la Generalitat –explicó a preguntas del fiscal– una de las cosas que le planteé fue que en algún momento con toda probabilidad nos encontraríamos con un mandamiento judicial de la Fiscalía o del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña y que no podía haber duda de que los Mossos actuarían cumpliendo esos mandamientos». «Preveía que esto pasaría –añadió– y no quería poner ninguna objeción ni ninguna duda a mi actuación y a la de los Mossos si esto se producía. Y la respuesta del presidente fue que yo hiciera lo que tuviese que hacer».

«¿Cuando usted asume su cargo lo hace con la voluntad de llegar a la declaración unilateral de independencia fuera de las vías legales y fuera de la Constitución?», le preguntó el representante del Ministerio Público. «No. Una de las conversaciones que tuve con el presidente precisamente era ésta. En todo momento, al menos lo que me expresó, la voluntad era poder llegar primero a la celebración de un referéndum pactado. Ni hablamos del tema de la declaración de independencia».

«¿Hubiera usted actuado contra la Constitución deliberadamente si hubiese sido necesario?», le inquirió el fiscal. «Yo firmé la convocatoria del referéndum el 6 de septiembre y es la única manifestación que he hecho en contra de un requerimiento del Tribunal Constitucional», admitió Forn, que el pasado 23 de enero renunció a su acta de diputado. El ex consejero de Interior –en prisión desde el 2 de noviembre de 2017– insistió en que los Mossos no eludieron el mandato judicial de impedir la celebración del referéndum ilegal «Hicimos todo aquello que se nos solicitó desde la Fiscalía y desde los tribunales», insistió una y otra vez al fiscal del Supremo.

«¿Requirió usted a su compañera de Gobierno (en referencia a la entonces consejera de Educación Clara Ponsati) para que se abstuviera de utilizar los colegios para la celebración del referéndum?», quiso saber el fiscal.

–Forn: «Ella lo conocía perfectamente, Yo hablé con ella...».

–Fiscal: «No, ella no, que si usted le requirió...».

–Forn: «Yo no puedo requerirle como miembro del Gobierno, pero en todo caso más allá no puedo ir. La observación desde el punto de vista político estaba hecha. No podía ir más allá».

El ex conseller aseguró que el dispositivo del 1-O no era competencia suya. «No decido los operativos. No puedo decir: “Ahora carguen”». Asimismo, se mostró molesto porque, según él, el coronel de la Guardia Civil Diego Pérez de los Cobos, que coordinaba el operativo policial, dejó plantados a los Mossos en la primera reunión convocada el 1-O. «Cuando Trapero se lo hizo saber le dijo que se le había olvidado y que el resto quedaban desconvocadas. Esto nos dolió».

► Oriol Junqueras: «No estaré nunca de acuerdo con la violencia»

A preguntas de su defensa sobre la posibilidad de seguir con la vía unilateral, Oriol Junqueras aseguró al juez: «Lo que nosotros nos planteamos es siempre buscar los mejores acuerdos posibles, hacer las mejores negociaciones posibles. Estamos convencidos de que hay recorrido amplio incluso en el marco de la Constitución y de sus posibles interpretaciones». Además, el ex vicepresident rechazó expresamente el uso de la violencia. «Cualquier forma de violencia siempre contará con mi oposición políticamente activa. No estaré nunca de acuerdo. Por muchas razones: de formación ética, moral, de educación, también de creencias religiosas».

Raúl Romeva: «Creo que la Constitución no está escrita en piedra»

«Siempre he pensado que la política es llegar a acuerdos, incluso desde la discrepancia. La próxima legislatura vamos a tener que hacer mucho de esto. La vía escocesa podría ayudar a encauzar esta situación», dijo Raül Romeva al juez Llarena. «Creo que la Constitución no es un texto escrito en piedra. Se puede interpretar y modificar y hay mucho margen para poder buscar acuerdos y soluciones a cuestiones complejas como son las que vivimos».

«En absoluto aceptaría el uso de la violencia. He sido siempre un firme militante de la acción no violenta. Un proyecto político que no opte por esa vía en todo caso no es el mío».

Carles Mundó: «Lo he dicho claro: mi opción no es la vía unilateral»

«Mi opción no es la vía unilateral. Las cuestiones de naturaleza política, como por ejemplo que un territorio quiera declarar la independencia, sólo se pueden formular en el marco del diálogo político», declaró el ex conseller de Interior. «No hay una única manera de interpretar la Constitución. Entiendo que una norma fundamental es la llave que debe permitir abrir todas las puertas, atender a las distintas sensibilidades sociales y políticas. La Constitución nunca debe ser una pared; al contrario, debe ser la puerta que dé respuesta a todas las aspiraciones políticas que de forma democrática y pacífica se planteen en nuestro país».

Jordi Cuixart: «Quizá hemos cometido errores por ingenuidad»

«No asumo la violencia nunca como medio de actuación para lograr ningún tipo de efecto», repitió al igual que sus ex compañeros. «Ahora lo que se tiene que hacer es un Gobierno que gobierne y que dialoguen entre ellos y, si se puede conseguir algun referendum, siempre tendrá que ser con el concurso del Gobierno de España». «Quizá hemos cometido errores –reconoció– y hemos pecado de ingenuidad, lo asumo, pero nunca hemos incumplido ninguna orden judicial ni nunca lo haré». Y expresó su «firme compromiso» de ceñir su proyecto en adelante «de acuerdo a las leyes, a la Constitución y a la legalidad vigente».