El Gobierno niega que España esté implicada en una operación para desestabilizar Venezuela

España y Venezuela viven una tensa calma diplomática desde que el gobierno venezolano citó el viernes al embajador de España en Caracas y llamó a consultas a su representante en Madrid, y posteriormente, a última hora del sábado, anunció la detención de dos ciudadanos españoles a los que acusó de conspirar para matar al presidente Nicolás Maduro.

El Gobierno español ha negado «rotundamente» las acusaciones que el ministro del Interior venezolano, Diosdado Cabello, sobre José María Basoa y Andrés Martínez Adasme, los dos españoles detenidos en Venezuela, a los que señaló como dos personas que querían desestabilizar el país y que tenían un arsenal de armas. Según fuentes diplomáticas «España desmiente y rechaza rotundamente cualquier insinuación de estar implicada en una operación de desestabilización política en Venezuela». Estas mismas fuentes también quisieron dejar claro que «los detenidos no forman parte del CNI ni de ningún organismo estatal».

Los detenidos son los bilbaínos Andrés Martínez Adasme y José María Basoa Valdovinos, de 32 y 35 años, respectivamente. Ambos se encontraban en Venezuela como turistas, según sus familias, que el pasado lunes, 9 de septiembre, y tras perderles la pista, denunciaron su desaparición en redes sociales y ante la Ertzaintza. La Policía averiguó que habían sido detenidos y se lo transmitió a los familiares, si bien no se ha indicado el motivo de las detenciones y la investigación policial por la desaparición sigue abierta.

La Embajada de España en Venezuela pidió al Gobierno de Maduro tener acceso a los dos detenidos, acusados de terrorismo, para verificar sus identidades y darles la asistencia necesaria. Sus familias están en contacto permanente con el Ministerio de Exteriores y el Consulado de España en Caracas, además de con el Gobierno vasco.

Sobre las identidades de los arrestados,según sus respectivos perfiles en LinkedIn, Basoa es Técnico superior en instalación, reparación y mantenimiento de instalaciones de gas, calefacción, fontanería y clima, mientras que Martínez se define como «desempleado buscando nuevos retos».

Ambos iniciaron su viaje el pasado 17 de agosto con destino a Caracas, donde alquilaron un coche que, en un principio, tenían previsto devolver el 5 de septiembre. Sin embargo, la última vez que se supo de ellos fue el pasado 2 de septiembre, cuando partieron de Inírida, Colombia, rumbo a Puerto Ayacucho, en el corazón del Amazonas venezolano. Desde entonces, no se han tenido más noticias de ellos, momento en el que sus familias dieron la voz de alarma ante la Ertzaintza.

Ante tal desesperación, las familias decidieron acudir a las redes sociales para anunciar de su desaparición. Así, el pasado 9 de septiembre, publicaron un comunicado en Facebook en el que pedían colaboración y ayuda ciudadana para localizarlos. «Estamos buscando a José María Basoa Valdovinos y Andrés Martínez Adasme, quienes fueron vistos por última vez en Inírida, Colombia, el lunes 2 de septiembre, rumbo a Puerto Ayacucho, Venezuela. Ambos viajaban sin guía y no hemos tenido noticias desde su última conexión telefónica ese mismo día a las 08:23 horas», decía el texto. Tras ello, las familias interpusieron la correspondiente denuncia por desaparición.

Estos dos españoles fueron detenidos junto con tres ciudadanos estadounidense y otro checo. En total, según el gobienro bolivariano, formaban parte de un grupo de 14 personas que estaban conspirando para asesinar al presidente venezolano, Nicolás Maduro, y a otros altos funcionarios.

Estas detenciones coinciden con el anuncio del gobierno norteamericano de imponer sanciones a funcionarios venezolanos y tras la decisión del Ejecutivo español de dar asilo político al líder opositor Edmundo González, quien llegó a España hace ya una semana.

Sin duda, este nuevo incidente agrava todavía más la tensión diplomática entre España y Venezuela, además, de las críticas por parte de la oposición. Mientras tanto, desde el Gobierno insisten en defender «una solución democrática y pacífica a la situación Venezuela».

Por su parte, desde el Partido Popular reprocha al Gobierno de Pedro Sánchez que no le dé información sobre la detención de los dos españoles en Venezuela. La vicesecretaria de Movilización y Reto Digital del PP, Noelia Núñez, afirmó ayer que el PP conoce la situación actual entre España y Venezuela y las detenciones de dos españoles en el país latinoamericano a través de los medios de comunicación y le ha reprochado al Gobierno que no le informe directamente como principal partido de la oposición que es.