González Pons comparecerá ante el magistrado casi un año después

El viaje a Madrid del juez Castro se aprovechará también para tomar declaración, en este caso como testigo, a Esteban González Pons (cuya citación está pendiente desde hace casi un año, pues llegó a fijarse para el 15 de mayo del pasado año en Madrid y, a continuación, se suspendió), a quien el instructor quiere preguntar en relación a la firma de un convenio con el Instituto Nóos en 2005, para la organización de unos Juegos Europeos, cuando era conseller del Gobierno autonómico, un proyecto que nunca se llevó a cabo, por el que Nóos ingresó 382.000 euros. Por su condición de parlamentario, González Pons tiene derecho a declarar por escrito o, incluso, en su despacho, una cuestión sobre la que deberá pronunciarse cuando reciba la citación judicial.

Quienes por el momento no tendrán que declarar sobre el «caso Nóos» son, según las fuentes consultadas, el ex presidente valenciano Francisco Camps y la alcaldesa de la capital del Turia, Rita Barberá. A día de hoy, y pese a las revelaciones de Torres de que el primer Valencia Summit se gestó en una reunión en Zarzuela en 2004 entre Urdangarín, Torres, Barberá y Camps (algo que éste ha desmentido), su citación parece improbable a no ser, añaden, que el testimonio de González Pons aporte nuevos indicios al respecto. Pero, además, hay una razón de peso para que la citación de ambos se antoje complicada: su condición de aforados obligaría a remitir toda la investigación relativa a los congresos organizados en Valencia al Tribunal Superior de Justicia valenciano, algo a lo que se ha resistido hasta ahora Castro.