DANA

La Guardia Civil no ha detectado grupos organizados detrás de las protestas de Paiporta

Los tres detenidos eran ciudadanos del pueblo y uno cercano que "perdieron los estribos" fruto del gran malestar reinante

El reyDon Felipe habla con vecinos de Paiporta durante su visita
El reyDon Felipe habla con vecinos de Paiporta durante su visita Biel AliñoAgencia EFE

No se ha detectado la acción de grupos ultras organizados en las protestas habidas en la la localidad valenciana de Paiporta durante la visita que realizadores los Reyes de España y el presidente del Gobierno, entre otras autoridades, según han informado a LA RAZÓN fuentes próximas a la investigación. Las pesquisas continúan a cargo de agentes de UCE-3, del Servicio Central de Información y, por lo tanto, no se puede dar un resultado definitivo hasta que concluyan. De hecho, van a permanecer sobre el terreno al menos hasta final de semana y la estancia se podría prolongar si fuera necesario.

La presencia de UCE-3 ha sido criticada por agentes y asociaciones de la Guardia Civil, que consideran que bastaban para hacer el trabajo de investigación los agentes destinados sobre el terreno. "Desde el primer momento, sabíamos que no eran ultras los que provocaron los incidentes contra el presiente del Gobierno y los automóviles oficiales. Eran ciudadanos que protestaban, algunos de los cuales, fruto de la tensión vivida, perdieron los estribos, lo que no disculpa lo que hicieron, reprobable en cualquier caso y que debe ser perseguido por la Justicia", comentan.

Los tres detenidos han pasado ya a a disposición de la Justicia, que ha dejado a dos en libertad sin medidas cautelares, aunque probablemente se enfrentarán a multas o penas de cárcel. Carecen de antecedentes.

La presencia de UCE-3 en la investigación se atribuye a una orden personal del ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, que quiere hacer buena la versión que instancias oficiales o socialistas difundieron sobre la presencia de ultras que habían organizado la protesta. El hecho de que el presidente del Gobierno dejara solos a los Reyes y se marchara del lugar ha causado un fuerte impacto en la opinión pública y el citado "relato" no ha encontrado sustento real, aunque no han concluido las pesquisas.

Otras fuentes han mostrado su extrañeza por el argumento, difundido desde los mismos sectores, de que la visita no debería haberse realizado: "El Jefe del Estado debía estar allí porque los que estaban sufriendo la tragedia son unos españoles más. De la oportunidad de la decisión da idea la respuesta de los ciudadanos que se sintieron arropados por sus Reyes, a los que pudieron explicar, con toda crudeza, no exenta de tensión, lo que estaban sufriendo, en algunos casos por la pérdida de todo lo que tenían".