Trabajo sin descanso

JUCIL pide medidas excepcionales para los guardias civiles afectados por las devastadoras inundaciones de la DANA

"Nuestros compañeros han trabajado sin descanso, y en muchos casos, han perdido sus vehículos y equipos personales", señalan desde la asociación

Los guardias civiles que trabajan en la zona cero carecen de botas de agua
Los guardias civiles que trabajan en la zona cero carecen de botas de aguaInternet

La tragedia provocada por la DANA ha afectado a miles de familias, entre ellas las de los propios guardias civiles que trabajan sin descanso para recuperar la normalidad en todas las localidades afectadas. "Nuestros compañeros han trabajado sin descanso, y en muchos casos, han perdido sus vehículos y equipos personales", señalan el secretario de la asociación profesional JUCIL, Agustín Leal. Y por este motivo, añade, "es fundamental que la administración garantice un transporte adecuado y que les proporcione el respaldo necesario para continuar con sus labores esencial en las zonas afectadas por las inundaciones".

Desde esta asociación han presentado una solicitud urgente ante la Comandancia de Valencia y la Dirección General de la Guardia Civil para implementar medidas excepcionales que garantizan el bienestar de los agentes afectados por las devastadoras inundaciones de la DANA en la Comunidad Valenciana. Reclaman una respuesta inmediata para paliar los perjuicios materiales, logísticos y emocionales que han sufrido estos agentes en lo que definen como un contexto de emergencia sin precedentes.

Leal insiste en que, a partir del próximo lunes, muchos de los guardias civiles no podrán llegar a sus acuartelamientos debido a la pérdida de sus vehículos y a las condiciones intransitables de las rutas. Entre las medidas solicitadas, se incluyen:

  • Reposición de uniformes y armamento: JUCIL solicita la reposición urgente de uniformes y chalecos balísticos, así como la revisión del armamento expuesto al agua debido a las inundaciones. La asociación propone flexibilidad en las normas de uniformidad debido a la falta de equipamiento.
  • Facilidades de transporte: Se pide la creación de rutas de autobuses temporales para facilitar el desplazamiento de los guardias civiles desde las zonas afectadas. Además, JUCIL pide la asignación temporal de vehículos oficiales para aquellos agentes cuyo lugar de residencia y destino están cercanos, pero no pueden acceder por las rutas normales debido a los daños.
  • Adaptación de turnos y horarios: Mayor flexibilidad en los turnos de trabajo, para permitir a los agentes atender sus necesidades familiares y personales.
  • Refuerzo de efectivos: La asociación propone la movilización de efectivos de otras zonas no afectadas para cubrir las necesidades operativas en las áreas más afectadas.
  • Eficacia operativa de personal esencial

Medidas, con carácter urgente

En ese escrito, el secretario general de JUCIL, Ernesto Vilariño, reitera la necesidad de que la Dirección General implemente estas medidas de manera urgente: "Desde el comienzo de la inundación, nuestros compañeros han trabajado jornadas de más de doce horas, muchos sin apenas descanso. El desgaste emocional es considerable. La Administración debe hacerse cargo de las necesidades logísticas y emocionales de estos guardias civiles, que están poniendo en riesgo su salud física y mental".

Y es que la respuesta del Gobierno ha sido insuficiente, especialmente respecto a la colaboración de otros efectivos de la provincia. "Muchos guardias civiles de otras áreas se han ofrecido para colaborar en el operativo, pero han tenido que hacerlo en su tiempo libre y sin uniforme, lo que ha limitado la eficacia del dispositivo y desaprovechado los recursos humanos disponibles", explica Vilariño.

Por su parte, Vicente Gómez, secretario de JUCIL en Valencia, ha compartido la experiencia de un compañero que, después de solo cuatro horas de descanso, regresó al trabajo porque "le resultaba imposible dormir y prefería tener la mente ocupada en el servicio". Este tipo de situaciones refleja el agotamiento y la frustración que sienten muchos guardias civiles, que trabajan en condiciones extremas y sin los medios necesarios para llevar a cabo su trabajo de manera eficiente y segura, aseguran desde la asociación.