El desafío independentista

Junqueras: el alcalde que ven en la tele y no en el pueblo

Su municipio, Sant Vicenç, tiene el paro más alto de la comarca

La Razón
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Cuentan los concejales de la oposición en Sant Vicenç dels Horts, un municipio del área metropolitana de Barcelona con casi 30.000 habitantes, que el alcalde «no está todo lo presente que debería estar en el municipio». Basta con viajar en el tiempo hasta el pasado jueves, cuando se reunió por la tarde el pleno de Sant Vicenç, para comprobarlo. El alcalde no estaba. Tenía un compromiso ineludible: presenciar y participar en el debate de investidura de Artur Mas como presidente de la Generalitat. La presencia del alcalde de Sant Vicenç en el Parlament era indispensable porque, al fin y al cabo, el alcalde se ha convertido en una figura de primer orden en la política catalana. Es Oriol Junqueras, el socio de Mas este mandato, el hombre que va a garantizar la estabilidad de CiU esta legislatura, siempre y cuando al presidente de la Generalitat no le tiemblen las piernas en el proceso de autodeterminación de Cataluña.

Junqueras (Barcelona, 1969), historiador de formación, ha hecho una carrera política fulgurante en el plazo de tres años. En junio de 2009 fue escogido eurodiputado por Esquerra (aunque no militaba) y dos años después fue proclamado alcalde (también sin militar). Desde el primer momento, por tanto, Junqueras ha tenido que cumplir con actividades ajenas a su municipio, que tiene la tasa de paro más elevada de toda la comarca del Baix Llobregat (un 22 por ciento con 3.200 desempleados).

A decir verdad, su papel en el ayuntamiento no es sencillo. Heredó una situación financiera terrible, ya que Sant Vicenç llegó a ser el municipio más endeudado (en términos proporcionales) de toda España después de Marbella. Junqueras no tiene la intención de dejar de ser alcalde. No le ha ido mal hasta el momento al alcalde ausente. Siendo primer edil y con ERC en pleno proceso de renovación durante el año 2011, Joan Puigcercós se fijó en él para tomar las riendas del partido porque no había otro municipio más importante en manos de Esquerra. Junqueras tenía el carné de militante desde sólo hacía unos meses, pero no fue impedimento para convertirse en el nuevo líder. Desde entonces, los vecinos de Sant Vicenç lo ven cada vez menos por el municipio. «La gente se queja porque desde hace tiempo lo ven por la tele y no por el pueblo», resume un concejal.