La «doctrina Lasarte»

Valentín Lasarte, asesino de siete víctimas de ETA, disfruta de su primer permiso ordinario de tres días, un privilegio penitenciario sólo apto para aquellos reclusos clasificados en segundo o tercer grado que hayan cumplido, al menos, una cuarta parte de la condena y tengan buen comportamiento.

Lo increíble de este permiso es que la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias del Ministerio de Interior deja claro que es la Junta de Tratamiento de la cárcel la que acuerda la concesión del mismo y, sin embargo, ésta se opuso a que Lasarte pudiera disfrutar de este beneficio. Resulta sorprendente que el artículo 154.1 del Reglamento Penitenciario establezca que sólo gozarán de estos permisos los reclusos «que hayan extinguido la cuarta parte de la condena o condenas» y, como es sabido, Lasarte tiene más de una decena de condenas que suman más de 400 años, por lo que la cuarta parte son 100 años. Por tanto, no debería gozar nunca de un permiso ordinario un asesino múltiple aplicando estrictamente la ley.

Sin embargo, la Sección Primera de la Audiencia Nacional entiende que es la cuarta parte de la «condena efectiva» de 30 años, y no de 400 años, es decir, aplican una nueva doctrina que podría llamarse la «doctrina Lasarte», diametralmente opuesta a la «doctrina Parot» de acumulación de condenas para redención de penas por trabajo.

Es la nueva vía para facilitar la pronta e injusta salida con permisos ordinarios de aquellos presos etarras que han cumplido más de la cuarta parte de la «condena efectiva». ¿Por qué este cambio de rumbo de la Audiencia Nacional si tenía informe en contra de Fiscalía e Instituciones Penitenciarias? Lasarte no ha colaborado con las autoridades en el esclarecimiento de más de una decena de casos sin resolver mientras él formaba parte de ETA asesinando y, por tanto, según la ley, no debería disfrutar de los beneficios penitenciarios de la «vía Nanclares». ¿Se trata de un «gesto» al sector duro del colectivo de presos residente en Cádiz? ¿Se trata de hacer política desde los tribunales? Desde luego, no sería la primera vez.