La hora de la verdad de Cifuentes: estas son las dudas que debe aclarar

La presidenta de Madrid comparece hoy en la Asamblea para dar las explicaciones sobre su máster que le exige la oposición.

El número dos de Cristina Cifuentes, Ángel Garrido, rebajó ayer en rueda de prensa las altas expectativas que, tanto los medios, como la opinión pública, como la clase política y hasta el propio PP tienen puestas en las declaraciones que hará la presidenta de la Comunidad de Madrid hoy a partir de las 16:30 en la Asamblea de Vallecas durante el Pleno Extraordinario convocado para tratar el espinoso asunto del «caso máster».

El portavoz del Gobierno regional insistió en que líder del Ejecutivo ya ha dicho todo lo que tenía que decir y aportado las pruebas suficientes para demostrar su integridad. Sea como sea, esté siguiendo o no una táctica y tenga o no su Trabajo de Fin de Máster (TFM) esperando a ver la luz esta tarde, lo cierto es que la presidenta autonómica tendrá que enfrentarse a un aluvión de preguntas de la oposición que, por un lado, busca una explicación «coherente» al cruce de versiones que siguieron a la noticia publicada el pasado 21 de marzo por «eldiario.es» y, por otro, esclarecer las incógnitas que siguen abiertas dos semanas después del escándalo.

El cambio de notas

Todo se destapó al comprobar que en 2014 se habían producido dos modificaciones en las calificaciones finales de Cifuentes, alumna que había cursado y finalizado un máster en la Universidad Rey Juan Carlos el año académico 2011-2012. Las calificaciones de una de las asignaturas cursadas por la presidenta, así como la de su TFM, pasaron de «no presentado» a «notable» dos años después de que Cifuentes hubiera terminado sus estudios. Las primeras explicaciones a esta anormalidad en el expediente académico no hicieron sino aumentar las dudas sobre lo sucedido. Fuentes del entorno de Cifuentes afirmaron en un primer momento que la presidenta había dejado algunas materias sin cursar premeditadamente por falta de tiempo. Sin embargo, al día siguiente la Universidad aseguró que la dirigente sí habría aprobado todo en el año 2012 y que las notas de «no presentado» se debían a un error en la transcripción de éstas al sistema informático. No obstante, horas después de respaldar a Cifuentes, la URJC decidió investigar el caso asignando a dos rectores independientes al centro.

El Trabajo Fin de Máster

Uno de los documentos que facilitó la jefa del Ejecutivo autonómico el 21 de marzo para probar su inocencia consistía en un correo electrónico de uno de sus profesores solicitando a una funcionaria el cambio de la nota de la asignatura de la discordia, pero, ¿y el TFM? El trabajo sigue sin aparecer, ni físicamente ni en formato digital, como tampoco queda clara su temática viendo que la presidenta no supo responder al respecto en Onda Cero esa misma noche. En cuanto a su presentación, quedan varias cuestiones abiertas: ¿cómo pudo la alumna presentar ante un tribunal académico su TFM sin el 100% del resto de asignaturas aprobadas, tal y como exige la normativa? Asimismo, si la dirigente popular defiende que terminó el máster en 2012, ¿cómo puede explicar que al año siguiente se matriculara de nuevo en la universidad para defender su trabajo?

La asistencia a las clases

En los criterios de evaluación del máster que Cifuentes asegura haber aprobado en la Universidad Rey Juan Carlos se especifica claramente que es imprescindible asistir, como mínimo, al 80% de las clases para superar las asignaturas. Sin embargo y como se ve en el resguardo de matrícula que ella misma ha hecho pública, se puede comprobar que la presidenta se inscribió en diciembre, cuando comenzaba en septiembre. Según los testimonios de sus compañeros, recogidos también por «eldiario.es», Cifuentes, que entonces era delegada del Gobierno, nunca apareció por las aulas ni se presentó a los exámenes.