Política

Laura Mintegi

La marcha de la vergüenza

En la marcha «silenciosa» se corearon consignas a favor de la amnistía de los presos de ETA. Miles de personas secundaron en Bilbao la manifestación autorizada por la Audiencia Nacional

Miles de personas apoyaron, ayer, la marcha a favor de los presos etarras
Miles de personas apoyaron, ayer, la marcha a favor de los presos etarraslarazon

El Estado de Derecho no impidió ayer que quienes apoyan a los terroristas de ETA tomaran las calles de Bilbao para reivindicar amnistía para quienes han asesinado a cientos de personas. Con los fondos públicos que manejan por su presencia en las instituciones colocaron una pantalla gigante en la fachada del Ayuntamiento de Bilbao –que gobierna el PNV–, alquilaron autobuses y recabaron apoyos de quienes no tienen reparo moral en considerar víctimas a los asesinos. La reivindicación, secundada por miles de personas, iba a ser una manifestación «silenciosa», pero comenzó con gritos a favor de la amnistía de los presos de ETA. A lo largo de la protesta –en la que las ikurriñas se mezclaban con banderas de Navarra y alguna que otra señera independentista– se corearon, además, consignas a favor de la independencia y de la vuelta «a Euskal Herria de los presos y refugiados».

Algunas de las personas que apoyaron la convocatoria a favor de los presos etarras, como los actores Willy Toledo y Pilar Bardem, no aparecieron por la manifestación, pero otros, como el diputado de ERC Joan Tardà no sólo se movilizaron a favor de la amnistía para los asesinos, sino que incluso compartieron el discurso proetarra de que los presos son tan víctimas como las personas a las que asesinaron. Tardà explicó que su partido está «al lado de todas las víctimas, empezando por las que están en la cárcel».

La consigna en la manifestación fue no corear los eslóganes habituales en este tipo de marchas de apoyo a ETA, sino limitarse a las frases que reclaman el traslado al País Vasco de los presos y la amnistía para ellos. Y el discurso final, un mensaje de apoyo a los familiares de los presos, que siguen sufriendo, según el relato de los proetarras, «vulneración de derechos», y un llamamiento a los gobiernos español y francés para que adapten su política penitenciaria al nuevo tiempo, se entiende que de ausencia de atentados. Como broche, un mensaje de confianza, porque «la lucha será larga, pero lo vamos a conseguir».

Las víctimas del terrorismo y el PP han criticado que se haya permitido la manifestación, cuyo lema «Derechos humanos. Solución. Paz. Euskal Presoak Euskal Herrira» fue considerado penalmente «neutro» por el juez de la Audiencia Nacional Javier Gómez Bermudez, que autorizó la marcha. La presidenta de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), Ángeles Pedraza, no entiende la decisión judicial y ayer aseguró que «si los jueces creen que promover una movilización apoyando a asesinos no humilla a las víctimas del terrorismo, tenemos que empezar a educar a los jueces y decirles quién es ETA». En esa misma línea, el presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, calificó la manifestación como «una marcha a favor de delincuentes orgullosos de sus asesinatos».

ERC, junto a la plana mayor batasuna

La plana mayor de EH-Bildu –representada, entre otros, por Laura Mintegi, Peio Urizar, Oskar Matute, el diputado general de Guipúzcoa Martin Garitano, Patxi Zabaleta y Juan Karlos Izagirre, alcalde de San Sebastián– estuvo arropada ayer por el diputado de ERC Joan Tardà, quien no tuvo ningún reparo en asistir a la protesta codo con codo con destacados ex dirigentes de la ilegalizada Batasuna como Pernando Barrena, Joseba Permach, Rufi Etxeberria y el histórico líder de HB Tasio Erkizia. Tardà dijo estar «al lado de todas las víctimas, empezando por las víctimas que están en la cárcel».A la protesta también asistió el ex consejero de Vivienda vasco Javier Madrazo (IU).