Editorial Planeta
Lara: «Si Cataluña se independiza, me llevaré Planeta a Sevilla»
El presidente del Grupo Planeta, José Manuel Lara, aseguró ayer en el programa de Canal Sur Televisión «Pido la Palabra» que «si Cataluña se independizara, trasladaría la sede central de su empresa a Sevilla». Hasta ahora, Lara sólo había apuntado que el grupo editorial saldría de Cataluña sin concretar el destino. Desde ayer, comentó que se había mantenido en secreto «para no dar pistas». En cualquier caso, el empresario descartó que se produzca este hecho porque no cree que la amenaza independentista triunfe, ya que no cuenta con el apoyo suficiente ni dentro ni fuera de España y es «inviable» económicamente. Además, pondría en peligro la estabilidad de otros países de la Unión Europea en los que también se producen tensiones independentistas.
El presidente del consejo de administraciónde Atresmedia no rehuyó ninguna pregunta de los espectadores y se mostró crítico con el poder político: «Los políticos te oyen mucho pero no te escuchan». Abogó por un cambio en la ley electoral para evitar la «partitocracia» y defendió la aportación de la monarquía a la estabilidad del país. «No soy monárquico, pero sí muy juancarlista. Fue una bendición para este país». Y aseguró que la Monarquía española es la jefatura de Estado «más barata de toda Europa».
Se mostró optimista sobre la fortaleza de la economía española y señaló que la reforma laboral «tiene aspectos mejorables», apostando por la regulación de los «minijobs». Y reclamó la que a su juicio es la reforma más urgente que necesita el país: la de la Justicia, «para que los casos estén resueltos en seis meses».
En clave catalana, Lara mostró su «convicción» de que a Jordi Pujol «no le van a imputar nada». Ahora bien, «otra cosa son sus hijos», matizó.
La corrupción también copó parte de su intervención. Defendió que, pese a lo que se publica diariamente, España no es un país corrupto. «En Francia todos los jefes de Estado han sido procesados», manifestó. En este sentido, criticó que esa imagen que se traslada internacionalmente está afectando a los intereses del país.
Igualmente, rompió una lanza en favor de la clase política, «maltratada» por la opinión pública y a la que no se le ofrecen «estímulos» para desarrollar su actividad. Y puso un ejemplo de colaboración y lealtad: EE UU, donde demócratas y republicanos son capaces de ponerse de acuerdo para votar conjuntamente en función de los intereses de la nación.