Las primarias del PSOE, a doble vuelta si el ganador no suma un tercio de los votos

¿Segunda vuelta? De entrada, no. Es más propia, dicen, de un sistema presidencialista como el de Francia o Italia, donde los candidatos a primarias del PSF o del PD pasaron por ella. En el PSOE no lo tienen claro. De hecho, la doble vuelta fue una de las propuestas de la federación extremeña que fue rechazada en la reciente Conferencia Política que sentó las bases del nuevo proyecto político y orgánico de los socialistas. Hoy, sin embargo, el borrador que redacta la Secretaría de Organización que dirige Óscar López establece este sistema para el caso en el que el ganador de las primarias no obtuviese un tercio de los votos registrados.

La decisión aún no es defintiva porque el texto será elevado a consultas a las distintas federaciones a partir de la próxima semana, a ocho días sólo del Comité Federal que el próximo 18 debe aprobar tanto el calendario como el Reglamento. En principio, había un amplio consenso para evitar la segunda vuelta, pero la dirección federal entiende que si a la consulta concurren más de tres candidatos y el vencedor se impone con un resultado inferior al 30 por ciento podría abrirse un debate sobre su legitimidad. Argumento éste que rechazan quienes contrarios a emular el sistema francés o el italiano defienden que este tipo de controversia se daría en una consulta de carácter exclusivamente interno, y no en un proceso abierto a la sociedad, donde la legitimidad la dan los ciudadanos.

Opiniones para todos los gustos que el número tres del PSOE trata estos días de testar antes de presentar el documento definitivo a los secretarios de Organización de los distintos territorios.

La Conferencia Política del pasado noviembre decidió, a propuesta de la dirección federal, rebajar del 10 al 5 por ciento el número de avales necesarios para concurrir a las primarias, lo que deja en unos 12.000 militantes los necesarios para avalar una candidatura. Aquella decisión , respaldada mayoritariamente, pretendía en el fondo evitar la segunda vuelta.

La Secretaría de Organización estudia también distintos sistemas para permitir la recogida telemática de apoyos, un asunto que no estará exento de polémica por las dudas sobre la veracidad que pueda suscitar por los problemas de verificación. En Ferraz entienden, no obstante, que mediante la firma electrónica del DNI o el sistema que utilizan las entidades financieras para las transacciones no habrá problema alguno, ya que ambos sistemas son fiables y seguros.

El boceto que dibuja la dirección federal establece, además de la firma de un documento de adhesión al ideario del PSOE y el pago de una cuota para los ciudadanos que quieran participar, un periodo de quince días para la recogida de avales. Un tiempo al que habrá que sumar otro no inferior a dos meses para llamar a la participación ciudadana y elaborar el censo, además de dos semanas de campaña para los candidatos. En total, no menos de tres meses.

Más allá de estos detalles técnicos sobre las primarias que elegirán candidato del PSOE para las próximas elecciones generales, el mayor interés sin duda está en la fecha de la consulta, el secreto mejor guardado por Alfredo Pérez Rubalcaba, que aún no ha comenzado la ronda de barones previa al Comité Federal a la que se comprometió antes de cerrar el calendario. En principio, antes de las vacaciones de Navidad la opinión mayoritaria era que el periodo más idóneo para la consulta era el próximo otoño. Pero, ya se sabe, que si hablamos del PSOE, nunca hay que descartar sobresaltos. Y menos, después de que la Generalitat haya anunciado para el 9 de noviembre la consulta independentista, lo que para algunos dirigentes del PSOE podría servir de argumento a la dirección federal para posponer el proceso. A saber.