
Guerra en Gaza
Llega a Madrid la última española de la Flotilla que permanecía retenida en Israel
La activista Reyes Rigo llegó a un acuerdo con la Fiscalía para rebajar los cargos de los que se le acusaba

Los cinco últimos miembros de la segunda flotilla retenidos por Israel, además de la activista mallorquina Reyes Rigo, han aterrizado a las 8.19 horas de este lunes en el aeropuerto de Barajas en Madrid en un avión comercial de la compañía Iberia, que salió de madrugada desde la capital de Qatar, Doha.
En concreto, han regresado a España los últimos cinco integrantes de la Flotilla de la Libertad, la segunda flotilla a Gaza, que fue interceptada por las autoridades israelíes la semana pasada. El sábado ya aterrizaron en Madrid otras tres activistas españolas que habían permanecido retenidas en Israel, entre ellas Jimena González, diputada de Más Madrid.
También ha vuelto a nuestro país la activista mallorquina Reyes Rigo, que era la única integrante española de la Global Sumud Flotilla --la primera flotilla-- que permanecía aún bajo custodia de Israel tras su arresto el pasado 1 de octubre.
Esta nueva operación de retorno a España, igual que las anteriores, ha sido gestionada por el Ministerio de Asuntos Exteriores desde sus servicios centrales, la Embajada española y por el cónsul en Tel Aviv, "que han realizado un extraordinario trabajo", han informado fuentes desde Exteriores.
De esta forma ya no quedan españoles de la flotilla retenidos en Israel, después de que en estas últimas dos semanas hayan regresado a España un total de 57 ciudadanos --49 en la Global Sumud Flotilla, 8 en la Freedom Flotilla-- tras haber sido detenidos en la prisión de Ktziot, situada en el desierto del Négev.
Los seis últimos españoles, que han llegado a la terminal 4S del Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas desde Qatar, han estado encarceladas hasta ahora "por no querer firmar la deportación voluntaria", aseguran a Europa Press fuentes de la flotilla Rumbo a Gaza
Acuerdo con la Fiscalía
Reyes Rigo ha llegado finalmente a España después de que llegara a un acuerdo con la Fiscalía para rebajar los cargos de los que se le acusaba.
Según la concejala de Unidas Podemos en el Ayuntamiento de Palma, Lucía Muñoz, que también participó en la flotilla, el cónsul español informó a la familia de Rigo de que durante una vista celebrada este viernes se había alcanzado ese acuerdo con la Fiscalía y se había impuesto una multa a la activista.
Un tribunal de Beer Sheva ha aceptado el acuerdo después de que Rigo se declarase culpable de haber provocado daño corporal y de asalto agravado a una guardia de la prisión en la que fue recluida.
Inicialmente, presentaron cargos contra ella por supuestamente haber mordido en la mano a una guardia y haberse negado a entrar en su celda, pero después esa acusación se rectificó alegando que lo que había hecho era clavar sus uñas en la funcionaria mientras se resistía.
En virtud del acuerdo, finalmente el tribunal la condenó a diez días de prisión -que ya había cumplido- así como al pago de una multa de 10.000 séquels (unos 2.650 euros) y ordenó su deportación.
Durante su comparecencia ante el juez, Rigo denunció haber recibido malos tratos bajo custodia. "Nos golpearon, nos empujaron y el quinto día atacaron a mi amiga e intenté protegerla", relató, siempre según el diario israelí. "Me cogieron por la cabeza y se me cayeron las gafas", añadió, detallando que estuvo con otras trece mujeres en una celda con capacidad para cinco, no les dieron agua y recibieron comida "podrida".
✕
Accede a tu cuenta para comentar