Crisis migratoria en Europa

Los asaltantes del vallado de Ceuta están entrenados «paramilitarmente»

1.200 subsaharianos se encuentran en los alrededores de Melilla para intentar un entrar violentamente en España-

Inmigrantes subsaharianos en Ceuta tras un salto masivo a la valla fronteriza. Efe
Inmigrantes subsaharianos en Ceuta tras un salto masivo a la valla fronteriza. Efelarazon

En los alrededores de Melilla, en el Monte Gurugu y zonas próximas, hay en la actualidad unos 1.200 subsaharianos que preparan un salto, según las informaciones que poseen las Fuerzas de Seguridad-

La cifra crece día a día con la llegada de nuevos inmigrantes que utilizan, encaramados en los vagones, la vía férrea Oudja-Rabat. Cuando llegan a Taourit, se suben a otro tren que les lleva a Beniensar, en las proximidades de la frontera con Melilla, según las mismas fuentes que siguen los acontecimientos de cerca y que subrayan el “efecto llamada” que produjeron las primeras declaraciones del nuevo Gobierno.

A este respecto, señalan la necesidad de que a los que entraron por la fuerza en Ceuta se les apliquen los procedimientos de expulsión ya que, de lo contrario, se dará la imagen de que “vale todo” contra la Giardia Civil que protege el vallado, incluida la violencia extrema, con unas consecuencias muy preocupantes para el futuro.

A este respeto, señalaron que hasta ahora, como ocurrió en los primeros meses de este año,los subsaharianos se empleaban cada vez con más violencia,pero que lo ocurrido el jueves supone unpunto de inflexión.

El salto, agregan, se había preparado con mucho tiempo y los subsaharianos habían sido organizados, “militarmente”, en grupos que debían desempeñar cada uno una misión concreta.

Preocupa el hecho de que las dos radiales eléctricas que fueron utilizadas no aparecieran entre los objetos incautados, lo quesignifica la existencia de esa organización. Con seguridad, serán usadas en nuevos asaltos.

Al frente de esta organización mafiosa hay tanto subsaharianos (algunos de ellos antiguos militares en suspaises de origen), que han encontrado un lucrativo negocio sin el riesgo de asaltar la valla; también, marroquíes.

A cada grupo se le encarga una misión: a unos, las radiales eléctricas; a otro, el lanzamiento de cal viva y ´ácido de baterías de automóviles a los agentes; a otro, tirar excrementos y objetos contundentes; a otro, las cizallas, etcétera.

Como novedad, algunos de los asaltantes llevaban cascos y escudos rudimentarios, dentro de la estrategia de ataque a los guardias. Asimismo, fueron encontrados dos “cócteles Molotov”, que no llegaron a utilizarse pero que habían sido fabricados.

En definitiva, técnicas de guerrilla urbana, no improvisaciones El uso de lanzallamas artesanales, con el elemento añadido de que los asaltantes tenían como objetivo, además del salto del vallado, atacar directamente a los agentes de la Guardia Civil, algo que no ocurría antes. De hecho, cuando lograron saltar el vallado y antes de dirigirse al CETI para extranjeros, se reagruparon con el fin de atacar con piedras y objetos contundentes a los coches oficiales de la Benemérita.

La finalidad no es otra que tratar de amedrentar a los agentes y transmitirles el mensaje de que “las cosas han cambiado” y que, a partir de ahora, pueden sufrir serios daños.

Según un agente con experiencia en la protección de los vallados, algunos de los asaltantes (la mayoría jóvenes con un gran sdesprecio por la vida, dispuestos a correr cualquier riesgo para lograr sus objetivos) fueron militares en sus países de origen y “son capaces de montar y desmontar un fusuil de asalto Kalashnikov con los ojos vendados en dos minutos”.

La caracterí9stica general de los que lograron franquear el vallado ceutí es, insisten las fuentes, la de que se trata de gente joven, dispuesta a todo para lograr su objetivo y que evitar a que los guardias civiles se lo impidan. “Se está transmitiendo la peligrosa imagen de que a estas personas,pese a la treintena de agentes heridos, no les va a ocurrir nada, lo que, unido al efecto llamada por las citadas declaraciones, suponen para las Ciudades Autónomas una situación realmente peligrosa.

La organización que prepara los saltos, en defitiva traficantes de seres humanos, ha montado toda una infraestructura para llevarles hasta las proximidades de la frontera.

Todo está perfectamente planeado con unas previsiones preocupantes por el creferido efecto llamada y la aparente impunidad con la que se puede agredir a un guardia civil,hasta con lanzallamas caseros que no por ello pueden dejar de provocar graves quemaduras.

En el salto del jueves se echó en falta la intervención de las Fuerzas de Seguridad marro9quíes, que sí se había producido en otras ocasiones. Esta asunto, sobre el que no se quiere incidir, podría agravar aún más la situación si se reproduce en el tiempo, según las citadas fuentes.