Cataluña

Los fontaneros del ala oeste

El gurú estratégico de Sánchez predijo hace un año su llegada al poder. El líder socialista se rodeará en La Moncloa de quienes no le han abandonado en sus reveses políticos

Pedro Sánchez entrando en Moncloa el pasado 2 de octubre de 2017/ Cipriano Pastrano
Pedro Sánchez entrando en Moncloa el pasado 2 de octubre de 2017/ Cipriano Pastranolarazon

Tras superar con éxito la moción de censura, Pedro Sánchez se refugió en su núcleo duro. Ese grupo de fieles escuderos que le acompañan desde que a finales de enero de 2017 decidiera emprender la reconquista de Ferraz.

Tras superar con éxito la moción de censura, Pedro Sánchez se refugió en su núcleo duro. Ese grupo de fieles escuderos que le acompañan desde que a finales de enero de 2017 decidiera emprender la reconquista de Ferraz. Copadas sus aspiraciones de llegar a la Presidencia del Gobierno, quienes se mantuvieron firmes a su lado en los sinsabores de la política participarán ahora de las decisiones más trascendentales del país. Entre los «cerebros» que han ideado la estrategia que ha llevado a Sánchez a La Moncloa destaca Iván Redondo. El líder socialista fichó a este asesor el pasado septiembre para dar un giro a su estrategia. Redondo ya se había fijado en el secretario general socialista tras su victoria en las primarias, un hecho que asimilaba con la icónica serie «Twin Peaks». En una entrada en su blog de «Expansión» el asesor nacido en San Sebastián predecía hace más de un año la llegada de Sánchez al poder. «Bien a través de una moción de censura (si se suceden más escándalos en el seno del PP y se conforma esa mayoría alternativa) o tras el resultado de unas elecciones anticipadas», rezaba el escrito. El fichaje de Redondo no estuvo, sin embargo, exento de polémica en el partido, ya que en otro tiempo fue jefe de Gabinete de José Antonio Monago, líder del PP en Extremadura, y parte implicada en arrebatar este histórico bastión al socialista Guillermo Fernández Vara.

Sánchez también volverá a contar con uno de los hombres fuertes del PSOE durante sus etapas en el Gobierno: el «gran fontanero» José Enrique Serrano. Quien fuera jefe de Gabinete de los Ejecutivos de Felipe González y José Luis Rodríguez Zapatero estuvo el viernes reunido con Sánchez y su círculo en el Congreso de los Diputados tras la moción de censura. Será el encargado de diseñar la estructura que tenga el nuevo gabinete, Sánchez quiere que el organigrama del nuevo gobierno esté «orientado a la gestión y a la obtención de resultados rápidos» de cara a las elecciones, por lo que no tendría por qué mantener la actual estructura del antiguo gabinete de Rajoy. José Enrique Serrano se quedó fuera del Congreso en las elecciones de 2015, pero logró volver en 2016. Actualmente preside una de las comisiones parlamentarias más ambiciosas para el PSOE: la que estudia el modelo territorial, cuya principal apuesta es acometer una reforma de la Constitución para lograr un mejor encaje de Cataluña que suavice el desafío soberanista.

Junto a José Enrique Serrano e Iván Redondo se ubicarán dos de los puntales de Sánchez en la comunicación. Su jefe de Gabinete, Juanma Serrano, y su jefa de Comunicación, Maritcha Ruíz. Ambos han permanecido a su lado tanto en su «primera vida» en Ferraz, como en el traumático camino de las primarias –desde la dimisión hasta su regreso a la dirección del PSOE–. Maritcha Ruíz es un perfil de la «máxima confianza» del líder ya que se conocen desde su etapa en las Juventudes Socialistas de Tetuán (Madrid) allá por los años noventa. En un primer momento se encargó de gestionar la comunicación digital del secretario general, pero tras la marcha de Manuel Delgado y, posteriormente, Verónica Fumanal –que administraba la comunicación personal de Sánchez– Ruíz fusionó y asumió en su persona las relaciones del PSOE y Pedro Sánchez con los medios.

Por último, también cabe destacar la figura de Juanma Serrano. En un segundo plano respecto a Maritcha Ruíz, Serrano huye de las cámaras y teje desde hace años la estrategia que lleve a Sánchez a La Moncloa. El «flechazo» entre el nuevo presidente y Serrano –que antes de ponerse a las órdenes del PSOE estaba vinculado a la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP)– se produjo en 2008 cuando el entonces secretario de política municipal del PSOE, Antonio Hernando, creó un equipo de trabajo en el que ambos coincidieron. A estos perfiles se suman otros de partido, como Ábalos, Lastra o Santos Cerdán, secretario de Coordinación Territorial –de facto el número dos de Ábalos– y Paco Salazar, secretario de Acción Electoral, para las importantes citas que se avecinan.