Los inversores alertan: el desgobierno puede ser un riesgo para el euro

El banco estadounidense Goldman Sachs cree que el desafío independentista en Cataluña y el «punto muerto» en la formación de Gobierno afectarán negativamente a la economía.

Existe un factor que en la economía es peor que la peste y del que los mercados financieros huyen despavoridos: la incertidumbre. Por raro que parezca, los inversores son capaces de digerir mejor una mala noticia que las dudas y el no saber qué pasará. Es por eso que la situación política en España en los últimos tiempos no es la más adecuada para consolidar la buena senda por la que camina nuestra economía, y los inversores han empezado ya a alertar de ello.

El banco estadounidense de inversión Goldman Sachs avisó ayer de que la incertidumbre política en España por los problemas para la formación de Gobierno va a afectar a la confianza de empresas y consumidores y, por extensión, a las perspectivas económicas del país y de la Unión Europea. En un informe en el que analiza la realidad económica europea, Goldman Sachs enumera las vulnerabilidades del ambiente político en distintos países: primero habla de Grecia y España, seguidas por Francia, Alemania y Reino Unido. Señala también al desafío soberanista en Cataluña, al que incluye entre los principales riesgos para la economía de la zona euro junto con la ralentización de la economía de China y el flujo de inmigración de Oriente Próximo.

Así, Goldman Sachs advierte de que la inestabilidad política en España ante la posibilidad de una convocatoria de referéndum en Cataluña puede debilitar la «estabilidad e integridad» de la eurozona y las previsiones de crecimiento económico para España.

La institución financiera asegura que parece que en 2016 se seguirá en un «punto muerto» político, resultado de las pasadas elecciones generales. En este sentido, señala la cuestión de si debe permitirse un referéndum sobre la independencia catalana –una de las reivindicaciones de Podemos, que el PSOE no acepta por el momento– como una importante pega para formar un Ejecutivo de coalición. «La situación es aún más complicada por las dificultades para formar un nuevo Gobierno en Cataluña tras las elecciones regionales de septiembre», opina la entidad.

A su juicio, unas segundas elecciones generales en 2016 son probables si la alianza de partidos «con mentalidad similar» propuesta por el presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, no se materializa. Goldman Sachs se refiere al posible pacto entre PP, PSOE y Ciudadanos, pero que por el momento parece lejos de materializarse. De hecho, ésta parece ser la tesis que sostiene la entidad. «El estancamiento surgido tras las recientes elecciones generales parece que continuará en 2016», afirma. «La incertidumbre política implícita va a pesar sobre la confianza de empresas y consumidores, y por ende en las perspectivas económicas», añade el banco de inversión.

Por otro lado, el banco estadounidense alerta también de la incidencia del problema de la crisis de los refugiados en Alemania, con la confianza en la canciller Angela Merkel en caída por primera vez desde que comenzó la crisis. Apunta además hacia Grecia, donde continúan los problemas con las reformas económicas y el pago de la deuda a las instituciones acreedoras.

También en el caso de Francia menciona el descontento popular por la inmigración, con la consecuencia de un gran crecimiento de los apoyos al ultraderechista Frente Nacional de Marine Le Pen. Mientras, en Reino Unido, destacan el problema de un posible referéndum sobre la permanencia en la Unión Europea este mismo año, informa Efe.

Situación «complicada»

De manera similar a las conclusiones presentadas por Goldman, un informe de la entidad holandesa ING titulado «No tan dulces dieciséis» –un juego de palabras sobre los problemas económicos europeos y mundiales del año que acaba de comenzar– también recalca las dificultades en España.

«De momento la economía española lo está haciendo bien, con el empleo registrando el año pasado el mayor crecimiento desde 2006, pero la situación política se ha tornado muy complicada», tanto por la incapacidad para formar Gobierno en Cataluña como en el resto de España.