Los jóvenes, los más optimistas ante la recuperación en 2015

El 64,7 por ciento de los encuestados recela de la mejoría de la economía este año y casi siete de cada diez españoles tienen igual o mayor confianza que en 2014.

Un año más, con permiso de la corrupción y de las grandes citas electorales (autonómicas y municipales, en mayo, y generales, en noviembre), el debate sobre la economía acaparará todas las miradas. Y, recién finalizado el año 2014, toca vaticinar cómo será el 2015 en lo que a la recuperación de la economía y la salida de la crisis se refiere. Los pronósticos de la ciudadanía son, sin duda, menos optimistas de los que auguró el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en su balance de año del pasado viernes. Aunque hay espacio para la confianza. Así se desprende de la macroencuesta de NC Report para LA RAZÓN sobre percepción de la recuperación, en la que casi siete de cada diez españoles, el 67,3 por ciento, considera que el año 2015 comenzará teniendo igual o menor confianza que el pasado año. En concreto, un 22,6 por ciento, está más esperanzado de cara al nuevo año, mientras que un 44,7 por ciento tiene la misma confianza que hace doce meses, siendo la franja de edad de entre 30 y 47 años los más optimistas en este sentido. Por el contrario, el porcentaje de personas que confían menos en 2015 es del 22,3 por ciento, siendo los ciudadanos de entre 45 y 64 años los más agoreros, mientras que un 10,4 por ciento no tiene una opinión concreta. El año pasado, con la caída en la prima de riesgo y las tasas positivas de crecimiento del PIB, el porcentaje de los que creían que el 2014 sería igual o mejor que el 2013 se quedó en un 62,8 por ciento, por lo que en doce meses se ha incrementado en un 4,5 por ciento.

El jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy, quiso cerrar el año 2014 con una encendida defensa de sus reformas como motor para salir de la crisis económica. Y, aunque anunció el «despegue definitivo» de nuestra economía, esa mejoría no ha llegado aún a los domicilios de los españoles. Ese es uno de los grandes retos del Gobierno para el año electoral que se inicia, además de recuperar la confianza de muchos votantes populares. Y es que tan sólo una cuarta parte de los encuestados, el 24,7 por ciento, coincide con el pronóstico del presidente del Gobierno en que 2015 será el año del inicio de la recuperación. Por el contrario, el 64,7 por ciento no considera que este año vaya a notarse esa mejoría, mientras que el 10,6 por ciento de los ciudadanos prefiere no pronunciarse. Entre esos datos, nada optimistas en términos generales, una cifra llama la atención al analizar los porcentajes según los segmentos de edad. Porque son los más jóvenes, de entre 18 y 29 años y precisamente uno de los colectivos más perjudicados por la crisis económica, los más optimistas con respecto a la recuperación. En concreto, un 27,4 por ciento considera que en los próximos meses se iniciará la mejoría de la economía, mientras que son los ciudadanos de entre 45 y 64 años, con un porcentaje del 68,8 por ciento, los menos optimistas a este respecto.

En cuanto a la percepción de si los avances en la recuperación de nuestra economía se perciben más dentro o fuera del país, es mayor el porcentaje de españoles que se decantan por la segunda opción. En concreto, el 51,3 por ciento considera que en el extranjero se aprecia en mayor medida esos avances en competitividad que defiende el Ejecutivo, mientras que el 43,1 por ciento considera que esa tendencia se nota más entre nuestras fronteras. La pirámide poblacional confirma en todos sus segmentos de edad esa opinión, salvo en la franja de 45 a 64 años, en la que se invierte esa percepción, y el 48,5 por ciento cree que se nota más dentro, por el 48,1 por ciento que opina que se aprecia más fuera de España.

Navidades

La mejoría en la creación de empleo, el incremento en el número de afiliados a la Seguridad Social o la mejoría en los datos del consumo hicieron que Rajoy sostuviera el lema de que éstas iban a ser las primeras Navidades de la recuperación del empleo, del crecimiento y de la actividad económica. Y, ante la pregunta de si al terminar estas fiestas, cree que habrá gastado más, menos o igual que el año pasado, seis de cada diez españoles, el 61,1 por ciento, consideraban que la factura acabará siendo similar a la de 2014. Además, el 15,6 por ciento opinaba que su gasto sería mayor, por lo que tres de cada cuatro españoles gastará más o igual que el año pasado. Tan sólo el 11 por ciento creía que gastaría menos que el año pasado.

La encuesta de NC Report, realizada entre el 23 y el 29 de diciembre a 700 personas, refleja además el escepticismo que la reducción por la retención en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) tendrá en la economía. Aunque esta medida significará de media un 12,5 por ciento menos de retención por este impuesto en la nómina mensual de los españoles, sólo el 41,7 por ciento considera que acabará notándose en su bolsillo. En el lado opuesto, casi cinco de cada diez, el 48,9 por ciento de los encuestados, considera que esta medida será apenas imperceptible en su salario, mientras que el 9,4 por ciento prefiere no pronuciarse al respecto. Resulta llamativo que sean precisamente los mayores de 65, ciudadanos que, en su gran mayoría, ya son jubilados y que, por tanto, están exentos de pagar este impuesto, los que consideren que sí repercutirá en su bolsillo. El 47,2 por ciento considera que sí se percibirá en la economía doméstica, por un 45,3 por ciento que cree que no se notará.

A la reducción del IRPF que entró en vigor ayer se suma también la rebaja de dos puntos en el Impuesto sobre Sociedades –del 30 al 28 por ciento–, que puede incluso llegar a ser del 20 por ciento en el caso de las pymes. Los pronósticos vaticinan que esta medida redundará indirectamente en beneficio del consumidor porque las empresas suelen trasladar esa reducción a sus precios finales. Sin embargo, los ciudadanos tienen dudas acerca de que estas medidas reactiven realmente la economía. Sólo el 35,6 por ciento considera que estas decisiones repercutirán positivamente en el relanzamiento de nuestra economía, mientras que el 47,1 por ciento considera que no reactivará los mercados. Por segmentos de edad, los mayores de 65 son los más optimistas respecto a estas medidas, un 37,9 por ciento considera que sí reactivarán la economía, mientras que los más jóvenes (el 53,1 por ciento) son los más escépticos sobre esta reducción impositiva.