La "margarita" dice ahora que Sánchez "se queda"

En estas horas de "reflexión" presidencial al PSOE le toca mantener viva la sensación de que la continuidad de Pedro Sánchez en Moncloa está sujeta a que haya una movilización masiva del partido mañana en Ferraz para demostrarle que el PSOE necesita que no abandone. En eso están quienes forman parte de su guardia de corps, moviendo a las estructuras territoriales como si lo que estuviera en juego fuera la continuidad en sí del propio partido. Pero desde esa guardia de corps esta misma mañana dejan un mensaje que en estas últimas horas no se escuchaba con tanta claridad: "Se queda".

El presidente se ha dado de plazo hasta el próximo lunes para acabar de deshojar la margarita, pero ya está hablando y recibiendo. Y si ayer lo que decían en su "guardia real" es que el futuro estaba en manos de la capacidad de movilizar al PSOE para presionarle, hoy lo que dicen es que la decisión será quedarse, y que se justificará en que merece la pena tras el apoyo recibido. Están convencidos también de que saldrán reforzados, y lo inmediato son las elecciones catalanas, donde el PSC tiene que ir a por una mayoría muy amplia, e incluso aún así el ex ministro Salvador Illa tendrá sus problemas para cuadrar las alianzas y conseguir el apoyo para un gobierno en solitario o la reedición de un tripartito con una ERC que huele a muerto.

La misma militancia que siempre ha sido el seguro de vida de Pedro Sánchez es la que ahora volverá a ser su salvación, o así lo dan por hecho quienes están en la órbita del presidente del Gobierno, tan en su núcleo duro que su caída les arrastraría también a ellos.

Del todo es posible a la margarita que dice que por muy enamorado que esté de su mujer, Begoña Gómez, hay más razones para pensar que la decisión es que continuará al frente de la Presidencia del Gobierno. Con una sociedad más polarizada, un partido más movilizado y más razones para justificar una ofensiva contra jueces y medios críticos. Se verá el lunes, pero el estado de opinión de quienes ocupan un cargo que está a expensas del futuro de Sánchez empieza a ser más optimista.