Media legislatura para consolidar el futuro

Los que formamos parte del Gobierno de Mariano Rajoy nos encontramos, hace no mucho, con un país pendiente del rescate. España era un problema para la UE, donde nuestra Administración había perdido toda credibilidad y tenía un papel irrelevante. Y en el ámbito internacional, nos miraban con inquietud y desconfianza.

Media Legislatura después, lo cierto es que el programa de reformas estructurales emprendido y el esfuerzo de todos los españoles nos han situado ya en el camino de la recuperación. Para ello hemos trabajado también en el ámbito de la Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente; Para que estos grandes activos de nuestra economía desplieguen todo su potencial, al servicio de la generación de riqueza y empleo.

Nos marcamos el reto de devolver la prosperidad al sector agroalimentario, mejorar su competitividad e impulsar su crecimiento. Hoy, la renta agraria ya no desciende, como ocurrió en los ocho años del Gobierno anterior, sino que aumenta: un 7,7% en 2013, alcanzando 24.338 millones de euros­. Las exportaciones agroalimentarios no dejan de crecer, con resultados excelentes para nuestro comercio exterior; alcanzaron un máximo histórico de 36.574 millones de euros en 2012, que se ha superado con un nuevo récord, 38.000 millones de euros, en 2013. Además, hemos logrado garantizar las ayudas de la Política Agrícola Común a agricultores y ganaderos, con 47.000 millones de euros para los próximos siete años. Y ya están en marcha cambios de enorme calado para mejorar el funcionamiento de la cadena alimentaria, impulsar la integración cooperativa, fomentar la innovación y potenciar la internacionalización. En definitiva, para que el agroalimentario se consolide como un sector económico fundamental.

En el ámbito pesquero, en el que España es una de las principales potencias del mundo, hemos conseguido aumentos de cuota en especies fundamentales, estableciendo, paralelamente, un riguroso control de la actividad de nuestra flota. Gracias a ello, hemos podido negociar una reforma de la Política Pesquera Común favorable para los intereses españoles, y obtener ayudas para la modernización de buques y para la industria. Además, hemos dado un importante impulso a la red de acuerdos internacionales, con logros como el Acuerdo UE-Marruecos. Y estamos trabajando en ordenar el caladero nacional para garantizar un mayor rendimiento de la actividad, al tiempo que fomentamos una acuicultura más competitiva.

Por otra parte, este Gobierno ha puesto en marcha, por fin, una política medioambiental eficaz y realista, basada en construir una alianza efectiva entre la protección del medio ambiente y el desarrollo económico. Trabajamos para recuperar el retraso de nuestro país en el cumplimiento de los compromisos europeos, tanto en materia de planificación hidrológica como de depuración, mientras impulsamos infraestructuras prioritarias. Y estamos sentando las bases de una política nacional del agua equilibrada y solidaria, con pasos tan decisivos como el acuerdo para la gestión del trasvase Tajo-Segura. Asimismo, en el camino hacia una economía baja en carbono, hemos llevado a cabo un cambio de estrategia dirigido a reducir emisiones de CO2 en España y a cumplir con el primer periodo del protocolo de Kioto. Igualmente, hemos impulsado la reforma de la ley de Costas y la simplificación de los procesos de evaluación ambiental, siempre garantizando la máxima protección.

En definitiva, la nación tiene expectativas de esperanza y optimismo. Los sectores económicos disponen de las herramientas necesarias. Los principales indicadores marcan un cambio de tendencia. Y tenemos media Legislatura por delante, con mucho trabajo por hacer, para, entre todos, consolidar un futuro de crecimiento y desarrollo sostenible.