El desafío independentista

Misión de los poderes públicos

La Razón
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Ejercer como juez en cualquier lugar de España viene haciéndose desde hace algunos años más gravoso debido a la falta de inversión en Justicia. Hoy empiezan los nuevos jueces de la 63 promoción, y ha llamado la atención que las últimas plazas elegidas sean en distintos lugares de Cataluña, planteándose cuál puede ser el motivo. La larga tradición empresarial, el rico tejido industrial y el carácter emprendedor del catalán y catalana, hacen que muchos licenciados en Derecho de aquí tengan otras ofertas laborales mucho más atractivas que preparar una oposición. Además, Cataluña tiene un volumen de población muy elevado, y dado que el número de juzgados se fija en función de esta población, hace que el número de partidos judiciales catalanes sea unos de los más altos de España. Pero aun siendo mayor el número de plazas ofertadas en Cataluña, sigue siendo insuficiente para dar respuesta a las necesidades ciudadanas ,que con la crisis se han visto incrementadas. Situados ya en Cataluña, el salario es el mismo para toda España, y dependiendo del lugar que se elija para efectuar la comparación, el coste de vida puede ser muy superior viviendo aquí o en cualquier otro sitio. A ese coste económico debe sumarse el de desplazamiento a los lugares de origen, necesarios para equilibrar la familia y el trabajo, sobre todo en los primeros momentos, y que tras la última reforma se ha agravado al reducirse los permisos por días propios que veníamos disfrutando los jueces. Además, ya el presidente del TSJ de Cataluña animó antes de ayer, en la jura de los nuevos jueces catalanes, a que hablaran en el idioma catalán, dado que es cooficial en Cataluña, lo que al principio algún juez que no sea catalán y no domine este idioma se le puede hacer más costosa su labor. Es por ello, o debería ser misión de los poderes públicos, hacer que el ejercicio de la judicatura sea atractivo a cualquier ciudadano, y si además ejerce en Cataluña no siendo de aquí, puedan arbitrarse mecanismos que lo puedan facilitar. No obstante, cada vez más jóvenes catalanes miran a la judicatura con vocación y jueces como yo, no catalana de nacimiento, terminamos encontrando motivos suficientes para quedarnos aquí.