Política

Caso Bárcenas

Moncloa y Génova ven una operación contra Rajoy

Tanto en La Moncloa como en el cuartel general del PP en la calle de Génova ven en los últimos movimientos del ex tesorero Luis Bárcenas, «una maniobara de desestabilización de Rajoy y de España».

La Razón
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El Partido Popular no se mueve de lo que ya ha dicho hasta ahora después de que el ex tesorero Luis Bárcenas, en la cárcel, utilizara el diario «El Mundo» para publicar los originales de la supuesta contabilidad del partido que apunta a sobresueldos en «B» para miembros del Gobierno de Aznar, entre ellos el propio jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy. En Génova, desde la dirección nacional aireaban ayer extraoficialmente la denuncia de «una maniobra de desestabilización de Rajoy y de España», y recordaban, al respecto, que precisamente el instrumento para ponerla en marcha «ha sido un medio de comunicación que ha apostado en el pasado por impulsar liderazgos alternativos al de Rajoy, y no sólo a cuenta de Esperanza Aguirre». Ayer la presidenta del Partido Popular madrileño y ex presidenta de la Comunidad de Madrid volvió a ejercer de «verso suelto» con unas declaraciones en las que dijo que si ha habido «irregularidades» en la financiación del partido, la obligación de la actual dirección es reconocerlas «y no mirar para otro lado».

Ya en el discurso oficial, la posición es conocida. A través de un comunicado a primera hora de la mañana, y de un argumentario distribuido entre sus cargos, también en una hora muy temprana, el PP aseguró que en las nuevas informaciones no hay elementos nuevos con respecto a enero, cuando se conoció la comisión rogatoria y parte del dinero que Bárcenas acumulaba en el extranjero.

La defensa del PP, y del Gobierno, aunque éste se mantuvo silente, fue que «no son los papeles del PP, sino los papeles de Bárcenas». Y que, por tanto, esos manuscritos son únicamente responsabilidad de quien los ha elaborado. También alegaron que tienen una contabilidad única, auditada por el Tribunal de Cuentas, y que está en manos de la Justicia. Que nunca ha habido sobresueldos en «B» ni pagos irregulares a dirigentes y personal del PP; que no han tenido cuentas fuera de España; y que la Justicia no está investigando la contabilidad del PP ni las retribuciones de sus dirigentes, «que siempre han sido legales, sino el origen de la fortuna en Suiza de una persona muy concreta, Luis Bárcenas». En el argumentario interno sí le mencionan explícitamente, a diferencia de la práctica habitual de omitir su nombre en la respuesta pública sobre este escándalo.

Génova resaltó que desde enero no se ha producido ninguna acusación contra el PP o sus dirigentes que desmienta la explicación que dieron en su día. Y que «en todo momento» han estado a disposición de los tribunales de Justicia y han mantenido «un alto nivel de exigencia» cuando han conocido irregularidades que afectan a sus militantes. «Hace más de cuatro años que el ex tesorero hoy investigado por la Justicia dejó de prestar sus servicios al partido», señalan en la nota distribuida para calma la inquietud de sus «cuadros medios» y de sus bases. Obvian en esta explicación las contradicciones sobre el despido y las retribuciones a Luis Bárcenas. «La única novedad desde enero es que la Justicia descubrió que Bárcenas tenía más dinero en Suiza y que además se ha quedado sin abogados por mentiroso», señala la cúpula del Partido Popular.