Moncloa da por zanjada la polémica: «Se le acabó la campaña a Feijóo»

La decisión de EH Bildu de incluir en sus listas a candidatos vinculados a ETA ha reventado la campaña. La del propio Bildu –que ha servido en bandeja al PNV argumentos para defender su posición hegemónica en el País Vasco– y la del PSOE, que hasta ahora había conseguido marcar la agenda con su hiperactividad legislativa en temas como la vivienda o el cambio climático. Quien mete este asunto en campaña son los mismos abertzales que ayer intentaron sacarlo con un comunicado en el que anticipaban que quienes tienen las manos manchadas de sangre no gestionarán con ellas lo público, esto es, que no tomarán posesión de sus cargos tras el 28-M.

Esta decisión causó alivio en Moncloa y en Ferraz, que tras una tibia respuesta en las primeras horas, había elevado considerablemente el tono de repulsa al movimiento de sus socios preferentes. En las filas socialistas se orienta la atención hacia las víctimas, quienes denunciaron y consiguen el triunfo de la renuncia de Bildu, y en el PP al que acusan de «instrumentalizar» y «apropiarse» de las víctimas en campaña con fines electoralistas.

Fuentes consultadas anticipaban que, ya antes del comunicado abertzale, no iban a «conceder» más recorrido a la cuestión de las listas electorales que las referencias obligadas de Sánchez en el mitin de Vitoria el lunes y de sendas sesiones de control en el Senado y el Congreso, ayer y hoy. Ahora, con el nuevo giro de los acontecimientos, consideran que se ha producido un «varapalo tremendo para el PP». «Hoy se acaba la campaña de Feijóo», anticipan fuentes gubernamentales. Se refieren a que el líder del PP había cimentado toda su estrategia de campaña en esta cuestión y que, aunque asumen que «intentarán estirar el chicle todo lo posible», «esto no tiene más recorrido».

Fuentes socialistas creen que la campaña se le está haciendo larga al líder del PP, que no sabe gestionar la agenda. «No afinan cuánto aire hay que dar a un tema», aseguran, y en concreto, sobre las listas electorales de EH Bildu entienden que solo contribuye a «reventilar a los hiperventilados» y que en lugar de favorecer al PP lo que hace es dar alas a Vox. Por el contrario, en la dirección socialista creen que esta cuestión «no nos iba a afectar».

«Nosotros vamos fuerte, con propuestas, y si el PP está en esto –ETA– es que no tiene propuestas que plantear a la ciudadanía. Nos va hasta bien», dicen, convencidos de lo que demanda el electorado son «soluciones a los problemas reales y actuales; no al espantajo de una banda terrorista que desapareció hace 12 años». En el PSOE se conjuran para que «no les saquen del carril», algo que han conseguido durante estos últimos días en los que han ido a rebufo de la polémica, por ello, se centran en atacar al PP y aprovechan para realzar las divergencias que existen entre la dirección de Alberto Núñez Feijóo y la Comunidad de Madrid en la gestión de este asunto.