Bilbao

Nueva burla de Bildu: califica a Buesa de «víctima política»

El PNV vota junto con los proetarras a favor de derogar la «Parot»

Laura Mintegi y Julen Arzaga escuchan a Arantza Quiroga, ayer, en el Parlamento vasco
Laura Mintegi y Julen Arzaga escuchan a Arantza Quiroga, ayer, en el Parlamento vascolarazon

La votación conjunta de EH Bildu y el PNV en contra de la «doctrina Parot» no fue el único acto a favor de ETA que se produjo ayer en el Parlamento vasco, donde desde la bancada de la izquierda abertzale se llamó primero «presos políticos» a los terroristas y se consideró después que el asesinato del socialista Fernando Buesa fue una «muerte por causa política». La tensión provocada por la utilización de los escaños parlamentarios para defender a ETA fue de tal magnitud que la presidenta del Parlamento vasco, Bakartxo Tejería, pospuso la constitución de la ponencia de paz, prevista para después del pleno, hasta que se propicien «las actitudes necesarias».

En la primera parte del pleno los nacionalistas de PNV y EH Bildu mostraron total sintonía, tanto al votar la moción de los proetarras que rechazaba la aplicación de la «doctrina Parot», como al negarse la presidenta de la Cámara, la peneuvista Bakartxo Tejería, a exigir a EH Bildu una rectificación del término «presos políticos» para referirse a los reclusos de ETA, tal como le reclamaba la parlamentaria del PP Nerea Llanos.

Sin embargo, la clasificación de Laura Mintegi como «muerte por causa política» del asesinato de Fernando Buesa provocó hasta la reacción del PNV. «Cuando es muerte, es muerte, pero cuando es asesinato, es asesinato», dijo Joseba Egibar, quien, en un intento de no posicionarse totalmente en contra de los proetarras, consideró que el PP había tenido parte de culpa de la tensión vivida en el Parlamento vasco al haberse «quejado reiteradamente» de que EH Bildu hubiera hablado de los miembros de ETA como «presos políticos».

Como cuestión de fondo, ayer el Parlamento vasco se posicionaba en contra de la «doctrina Parot» cuando el Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo está a punto de decidir sobre el recurso presentado por el Gobierno en contra de la sentencia favorable a la etarra Inés del Río. La mayoría nacionalista de la Cámara vasca quedaba patente frente a PSE, PP y UPyD que, con matices, rechazaban la presión al tribunal, mientras que, especialmente desde PP y UPyD se defendía la justicia de una doctrina que impide que los autores de un homicidio cumplan de forma efectiva la misma pena que los autores de 30 asesinatos.

En cuanto a la tensión en el Parlamento, la popular Arantza Quiroga recriminó con dureza a la portavoz de EH Bildu, Laura Mintegi, por calificar de «muerte por causa política» el asesinato de Buesa, hasta el punto de afirmar que no le extrañaba que hubiera permanecido «tan campante» en el homenaje al político socialista. Respondió Mintegi que no estuvo «tan campante en un acto en el que homenajeamos a una persona que ha muerto por una causa política, sea quien sea». Eso provocó que varios parlamentarios del PP pidieran a Mintegi desde sus asientos que no se burlara de la institución y de las víctimas.

La actitud de la presidenta del Parlamento vasco, Bakartxo Tejería, no reclamando a EH Bildu una rectificación del uso del término «presos políticos» en referencia a los terroristas de ETA provocó la presentación de una queja formal por parte del PP, en la que se reclama la incoación de un expediente sancionador por la utilización de un término ofensivo para las víctimas del terrorismo.

El PP no sólo criticó en esta queja la actitud del parlamentario de EH Bildu Julen Arzuaga, al utilizar la expresión «presos políticos», sino también la tolerancia de la presidenta del Parlamento vasco ante un discurso que «supone una justificación implícita de las acciones terroristas».