Londres

Nuevo choque entre la Armada y la Royal Navy en las aguas del Peñón

Imagen de archivo de una patrullera de la Guardia Civil en Gibraltar
Imagen de archivo de una patrullera de la Guardia Civil en Gibraltarlarazon

El Gobierno británico presentará una protesta formal ante el Ejecutivo español por lo que considera una nueva "incursión ilegal"de un buque de la Armada en las aguas que rodean el Peñón, y cuya soberanía se disputan los dos países. Una portavoz del Foreign Office ha confirmado este viernes a Europa Press que el pasado 5 de agosto el buque de la Armada Infanta Cristina entró dentro de las "aguas territoriales británicas de Gibraltar".

Una patrullera de la Royal Navy salió a su encuentro, pero desde el buque de la Armada se "alegaba de forma incorrecta"que estaban en aguas españolas, ha relatado la portavoz. "Posteriormente el navío se fue", ha explicado.

España no reconoce a Gibraltar más aguas que las del interior del puerto, ya que por el Tratado de Utrecht de 1713 solo cedió a la Corona británica la ciudad y el castillo de Gibraltar, junto a su puerto, defensas y fortaleza, no así el istmo ni las aguas circundantes.

Reino Unido en cambio argumenta que por la posterior Convención del Derecho del Mar de Naciones Unidas le corresponderían hasta 12 millas náuticas de mar territorial, aunque solo viene ejerciendo soberanía sobre tres. Más allá de las tres millas, para Londres son aguas internacionales.

Para el Foreign Office la actuación del Infanta Cristina supone "una violación de la Convención del Derecho del Mar de la ONU". "Emitiremos una protesta ante el Gobierno español", ha anunciado la portavoz.

La portavoz ha añadido que este tipo de "incursiones"representan una "violación de la soberanía"(británica) de las aguas, pero "no una amenaza".

En julio pasado, Londres convocó por quinta vez al embajador español en Londres, Federico Trillo, en protesta por la actuación de otro buque de la Armada entre las 7 y 9 millas de la cara de levante del Peñón --aguas territoriales españolas, por tanto, internacionales bajo el punto de vista de Londres-- que intentó alterar la ruta de varios barcos comerciales que salían o se dirigían a Gibraltar con la intención, denunciaba Reino Unido, de "alterar la actividad económica"del Peñón.

España protestó a su vez con un duro comunicado por las "acusaciones falsas"de Londres, pues el buque de la Armada, en "exquisito respeto"al derecho interno e internacional, pidió salir de las aguas territoriales a esos barcos porque se encontraban parados, vulnerando el derecho de paso inocente.

El Gobierno español consideró esa última convocatoria a Trillo "desproporcionada y carente de sentido". Además, ha avisado a Londres de que si aspira a reformar la UE para lograr otro encaje de Reino Unido --lo que implicaría reformar los Tratados, y para eso se requiere unanimidad de los Estados miembros-- sería mejor que no cree tensión en Gibraltar, según han reconocido a Europa Press fuentes del Ejecutivo.