Presidencia del Gobierno

Para un 49% la estabilidad la otorga el bipartidismo

El 52,9%, además, no es partidario de que el Parlamento esté fragmentado con una amalgama de fuerzas políticas.

El 52,9%, además, no es partidario de que el Parlamento esté fragmentado con una amalgama de fuerzas políticas.

La etapa democrática de España comenzó a gestarse cuando el Rey confirmó a Adolfo Suárez, miembro de la UCD, como presidente del Gobierno el 17 de junio de 1977, pese a que en las elecciones solo pudo obtener una mayoría simple. Sin embargo, Suárez se convirtió en el primer jefe del Ejecutivo de la democracia. Tras él llegó Leopoldo Calvo-Sotelo, también de la UCD, que gobernó de nuevo con una mayoría simple. Años más tarde, surgió la implantación del bipartidismo entre el Partido Socialista Obrero Español y el Partido Popular. Desde el año 1982 hasta nuestros días no ha habido ningún presidente del Gobierno que no haya pertenecido a una de estas dos formaciones políticas. La reciente incorporación de Pedro Sánchez a La Moncloa ha vuelto a dar alas al bipartidismo, esta vez por parte del PSOE. Sin embargo, los españoles no parecen preocupados con esta alternancia de presidentes entre el PP y el PSOE, ya que un 47,2% considera que la experiencia de gobiernos de los dos grandes partidos ha sido positiva para nuestro país. Un 52,9% de los encuestados tampoco es partidario de que aparezca un Parlamento sin mayorías claras. Los encuestados mayores de 55 años son quienes más se oponen a que se produzca este escenario político, un 58,9%. Una buena parte de los españoles, un 49%, piensa que el bipartidismo es un factor de estabilidad positivo, que genera fiabilidad, a pesar de que el 52,4% reconoce que un Parlamento con un mayor número de opciones representa mejor la democracia de España. Por el momento, el Partido Socialista continuará en el poder hasta el próximo año 2019 en el que se celebrarán elecciones generales.