El PSOE de Castilla-La Mancha, a favor de una financiación que no dependa del número de habitantes

Se ha abierto el melón y nadie quiere quedarse atrás. El presidente de la Junta de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, único barón socialista con mayoría absoluta, pretende tener voz en el debate sobre la financiación autonómica, abierto a raíz de las conversaciones que pudieran establecerse entre el entorno del presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, y los partidos políticos independentistas.

Tras las declaraciones de la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, reconociendo que existían contactos con algunos grupos independentistas catalanes donde podría negociarse una quita de la deuda de esta comunidad autónoma, desde el entorno de Page no se han dejado de enviar claras señales de disconformidad con alguno de esos planteamientos.

Fuentes del presidente castellano-manchego, han afirmado esta semana que «Castilla-La Mancha no va a consentir de ningún modo que se reciba un euro menos que cualquier otro territorio». En este sentido, han expresado su confianza de que un gobierno socialista no defienda privilegios entre diferentes comunidades autónomas.

Las alarmas saltaron cuando se tuvo constancia a través de los medios de comunicación de que podría estar ofreciéndose una quita de la deuda de Cataluña a los grupos independentistas para negociar una nueva investidura de Pedro Sánchez. Los setenta mil millones de deuda que arrastra aquella comunidad autónoma deberían ser sostenidos por el resto de regiones españolas.

«Un Gobierno socialista estará contra privilegios y diferencias entre españoles»

El presidente de la Junta ya ha hecho ver de forma clara y expresa su rotunda oposición a ese posible escenario. Además fuentes del Gobierno regional han insistido en que «un Gobierno socialista estará contra privilegios y diferencias entre españoles», por lo que están convencidos de que una vía de disimilitud entre comunidades autónomas no debería explorarse por parte del propio Partido Socialista.

En este sentido, en las últimas horas, desde la secretaría de organización del PSOE en Castilla-La Mancha, su titular, Sergio Gutiérrez, ha lanzado un tuit en el que se da un paso más y entra de lleno en el debate sobre la financiación autonómica.

Gutiérrez confronta directamente con Joan Baldoví e Isabel Díaz Ayuso, al haber propuesto ambos que el modelo de financiación dependiese directamente del número de habitantes. «Baldoví se equivoca. Ayuso quiere (como Andalucía o Compromís) que la financiación autonómica vaya en relación al número de habitantes. Emiliano García-Page quiere, como Asturias o Aragón, que se financien justamente los servicios públicos, sea cual sea su población y eso es lo más socialista y justo».

El presidente regional no está dispuesto a callarse ante el panorama que se avecina

Lo que queda claro y demostrado es que Castilla-La Mancha y su presidente, Emiliano García-Page, no parecen estar dispuestos a quedarse callados ante el panorama que se avecina, aunque luego habrá que ver en qué situación queda cada uno de los actores que participan en este debate político.

Otro asunto que saltó ayer a la actualidad y que implica y sacude todo el tablero nacional es el del agua. De nuevo, se presentó un recurso ante el Supremo por la aprobación del plan de cuenca del Tajo. El propio Sergio Gutiérrez lo recogía así en sus redes sociales: «Los regantes denuncian ante el Supremo el recorte del Trasvase. Volveremos a ganar por décima vez porque tenemos la razón, la ley y al sentido común de nuestro lado. La pena es que en la defensa de Castilla-La Mancha, el PSOE se encuentre solo… ¿Dónde están los alcaldes de Toledo y Talavera?», escribió en su cuenta personal de Twitter.

Y es que hasta el momento han sido varios los recursos presentados ante el Alto Tribunal para tratar de echar atrás el caudal ecológico del río Tajo, sin que ninguno de ellos llegara a buen puerto. Es por ello, que Page también ha repetido en más de una ocasión que «ahora son los demás quienes recurren a los tribunales y no nosotros, porque la ley ya está de nuestra parte».

Sea como fuere, con varios frentes y flancos abiertos y aun estando en el mes de agosto, Emiliano García-Page no renuncia a expresar sus opiniones y condicionar el debate político.