Acuerdos

PSOE y Junts se reúnen en Suiza tras la aprobación de la ley de amnistía

Es la cuarta reunión desde que ambos partidos consolidaran su acuerdo de investidura

Las delegaciones del PSOE y de Junts han mantenido este sábado la cuarta reunión en Suiza tal y como marca el acuerdo de investidura entre ambas formaciones políticas. El acuerdo se produce tan solo dos días después de que el Congreso de los Diputados diera luz verde a la ley de amnistía, previo paso al Senado y de nuevo al Congreso para su aprobación final a finales de mayo y en la misma semana que el Govern ha convocado el adelanto electoral en Cataluña para el próximo 12 de mayo tras que los Comunes tumbaran los presupuestos autonómicos.

La cita, desvelada por el PSOE, ha tenido lugar en Suiza y ambos equipos han constatado que la ley de amnistía permitirá -una vez aprobada- "poner en marcha los equipos de trabajo en los dos grandes ámbitos acordados", que, se añadirán a los que ya existen en el ámbito de la lengua catalanas y de la ley de delegación de competencias en inmigración", según explican fuentes socialistas, así como "asegurar el cumplimiento del acuerdo de Bruselas".

Los socialistas no especifican el momento concreto de la cita, ni tampoco quienes han acudido a la misma, aunque, como parte de la delegación socialista, las conversaciones y reuniones las lidera el secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán. Tampoco explican si en la cita estaba presente el embajador salvadoreño Francisco Galindo, que ejerce como mediador según lo acordado por ambos partidos.

En la cita se analizó la recién aprobada ley de amnistía, un trámite que, según apuntan, permitirá poner en marcha una fase de la negociación con la activación de dos nuevos equipos de trabajo: uno sobre los déficits y limitaciones del autogobierno y otro sobre el reconocimiento nacional de Cataluña. En el idéntico comunicado con el que la dos formaciones han informado del encuentro únicamente se señala que la reunión se ha producido en Suiza y que durante la misma "se ha puesto en valor la aprobación de la ley de amnistía, que era una de las condiciones pactadas para poder abordar la resolución del conflicto político" catalán.

Fue el pasado jueves, un día después de que se anunciara el adelanto de las elecciones catalanas al 12 de mayo, cuando el Pleno del Congreso aprobó la ley de amnistía y la remitió al Senado, donde el PP, que tiene mayoría absoluta en la Cámara Alta, podrá retenerla, cómo máximo hasta el 15 de mayo. "La aprobación de la ley permitirá a las partes poner en marcha los equipos de trabajo en los dos grandes ámbitos acordados, que se añadirán a los que ya existen en el ámbito de la lengua catalana y de la ley de delegación de competencias en inmigración, y asegurar el cumplimiento del acuerdo de Bruselas", concluye el comunicado difundido, respectivamente, por PSOE y Junts.

Esos dos "grandes ámbitos permanentes" de trabajo recogidos en aquel documento toman como base las "aspiraciones de la sociedad catalana y las demandas de sus instituciones". El acuerdo cita, en concreto, las relacionadas con "la superación de los déficits y limitaciones del autogobierno y las relativas al reconocimiento nacional de Cataluña". En este sentido, se acordó que en lo relativo al reconocimiento nacional, Junts propondrá la celebración de un referéndum de autodeterminación sobre el futuro político de Cataluña amparado en el artículo 92 de la Constitución, mientras que el PSOE defenderá el amplio desarrollo, a través de los mecanismos jurídicos oportunos, del Estatut de 2006, así como el pleno despliegue y el respeto a las instituciones del autogobierno y a la singularidad institucional, cultural y lingüística de esta comunidad.

En el ámbito de los déficits y limitaciones del autogobierno, Junts propondrá de entrada una modificación de la Ley Organica de Financiación de las Comunidades Autónomas (LOFCA), que establezca una "cláusula de excepción de Cataluña que reconozca la singularidad en la que se organiza el sistema institucional de la Generalitat" y que facilite la cesión del 100% de todos los tributos que se pagan en Cataluña. De su lado, el PSOE "apostará por medidas que permitan la autonomía financiera y el acceso al mercado" de Cataluña, así como un diálogo singular sobre el impacto del actual modelo de financiación sobre Cataluña. En este ámbito, el pacto también prevé abordar los elementos esenciales de un plan para facilitar y promover el regreso a Cataluña de la sede social de las empresas que cambiaron su ubicación a otros territorios en los últimos años. Mediante este pacto de investidura, Junts condiciona su apoyo para garantizar la "estabilidad de la legislatura" a los "avances y cumplimiento de los acuerdos" que vaya alcanzado con los de Pedro Sánchez en los dos "ámbitos permanentes" de negociación acordados por ambas partes.

Hasta el momento, PSOE y Junts habían mantenido tres reuniones con la presencia del mediador internacional que verifica el cumplimiento de los acuerdos alcanzados entre ambos partidos para la investidura de Pedro Sánchez. Unas citas a las que el expresident de Cataluña, Carles Puigdemont, ha acudido presencialmente a todas. La tercera cita, en secreto, tuvo lugar a finales de febrero, en la inmediación de las negociaciones para aprobar la ley de amnistía y sirvió para desbloquear el acuerdo.

Fuentes de Junts relatan que ya se había planeado el primer encuentro entre Puigdemont y Sánchez, como el propio presidente del Gobierno desveló en el mes de diciembre, con el objetivo de una foto común que tendría como objetivo normalizar las relaciones entre PSOE y Junts. Esta foto, sin embargo, se retrasará hasta que tenga lugar la aprobación final de la ley de amnistía.

La primera cita entre ambos partidos, con la fundación Henry Dunant como verificador internacional, tuvo lugar en el mes de diciembre, un mes después de la investidura del presidente Pedro Sánchez.